Ribadesella, P. MARTÍNEZ

Con las manos curtidas de pintar y el corazón contento de ver a tantas antiguas alumnas y amigos de Ribadesella. Así entró la artista local Pilar Miranda en la sala de exposiciones de la Casa de Cultura, donde la tertulia «El Garabato» le ha organizado una muestra en homenaje a sus años de docencia en la villa. El homenaje a Miranda era el primero de una serie de actos dentro de los «III Encuentros Sociales Manos Curtidas», organizados por la misma tertulia y que ayer congregaron a una auténtica multitud en el edificio municipal.

En el homenaje tomaron la palabra Estela Rosete, quien describió a la artista como «referente y faro en el Arte». También lo hizo la que ahora ha tomado su testigo como profesora de pintura, Paci Román, que le dedicó unas hermosas palabras de agradecimiento. La alcaldesa, Charo Fernández Román, que también fue alumna de Miranda, le entregó un ramo de flores en nombre de todas las personas que pasaron por su aula.

Los actos continuaron en el salón de actos de la Casa de Cultura, en el que se aprovechó hasta el descansillo de la escalera para colocar sillas. Así todo muchas personas se quedaron de pie y sin poder asomarse a la sala donde se proyectaban vídeos de Pablo Casanueva.

Las piezas audiovisuales recogen varias historias de riosellanos cuyas trayectorias vitales forman parte intrínseca del municipio y se alternaron con las representaciones teatrales de los centros Manuel Fernández Juncos y Nuestra Señora del Rosario, que prepararon para la ocasión varias escenas de la vida de las mujeres riosellanas durante el pasado siglo.

Después comenzó el coloquio con varias personas también emblemáticas del municipio, que emocionaron e hicieron reír. El actor Saturno Cerra desató más de una sonrisa durante el relato de su vida, que Javier Mateos iba hilando con preguntas. Le acompañaron en la mesa los tertulianos Aurelia Blanco, Arsenio Prieto, María Luisa Cofiño y María Elena del Torno, que también compartieron con los presentes sus experiencias vitales. Tras la tertulia se entregó el tercer premio «Manos Curtidas», que este año recayó en la Asociación de pensionistas «Virgen de Guía» y que recogió su presidente, Jaime Álvarez.

La historia viva del concejo se convirtió ayer en la protagonista, una vez más y por tercer año, de una tarde de encuentro entre generaciones, entre sectores, entre riosellanos y, sobre todo, entre manos curtidas, divertidas y muy emocionadas, que esta tarde volverán a estrecharse.