Arenas de Cabrales,

Emilio G. CEA

«Es muy triste que vengan los lobos a echarnos de los pueblos. No podemos permitir que se nos trate como a delincuentes por intentar defender nuestros intereses. A veces parece que es más importante que el lobo se manque contra las alambradas de las explotaciones que el daño que causa a nuestros animales». Con estas palabras Mercedes Cruzado, secretaria general del sindicato COAG en Asturias resumía el sentir de los ganaderos presentes ayer en Arenas de Cabrales en un acto en el que se pretendía buscar puntos de unión para solucionar la problemática que el sector está padeciendo por los reiterados ataques del lobo a sus ganaderías.

A la reunión asistieron unos cuarenta de ganaderos de la comarca, que se mostraron muy pesimistas y aseguraron que si el problema del lobo no se ataja de inmediato los núcleos rurales corren serio riesgo de despoblación pues a su modo de ver los perjuicios que los ataques del lobo les están causando pueden abocar a la desaparición del sector. «La única forma de fijar población en los pueblos es a través de la ganadería», sostuvo Cruzado.

Mercedes Cruzado afirmó también durante la reunión que los ganaderos están «hartos de que los consejeros de los diferentes gobiernos nos dediquen buenas palabras pero a la hora de la verdad no hagan nada por defender nuestros intereses». La secretaria general de COAG en Asturias manifestó que el pasado sábado se puso en contacto con la nueva consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez, para trasladarle la preocupación del sector por la problemática de los lobos. COAG espera que la próxima semana pueda producirse una primera toma de contacto con la Consejera.

Los ganaderos se mostraron a su vez preocupados por la «imagen negativa» de su profesión que, según indicaron, diferentes grupos ecologistas están dando a la sociedad. «Nosotros no queremos que el lobo desaparezca, tan solo reclamamos que se le mantenga alejado de nuestro ganado», sostuvieron. El ganadero de Arenas de Cabrales Ceferino Fernández fue uno de los más críticos durante en encuentro: «hay gente interesada en que no salgamos adelante. No es justo que un lobo mate a una hembra y nos den trescientos euros, cuando tiene toda una vida por delante y su precio rondaría los seis mil euros. A este paso vamos a tener que darle a los lobos la carne pelada, manifestó, mientras pedía «carta blanca» para solucionar la problemática.

El ganadero cabraliego Rogelio López pidió una mayor determinación dentro del sector para exponer de forma conjunta y en una sola voz su problemática. Asistieron los concejales de Cabrales Antonio Viejo y Carlos Puente, así como el secretario local de COAG, Juan Vicente Vallines.