Lastres, P. MARTÍNEZ

A fuego lento, contenido, de forma discreta, un conflicto se ha ido cocinando en Lastres durante el último año. En la última semana han asomado varias burbujas bullentes y la cosa podría salirse de la cacerola y salpicar a unos vecinos que, como casi todos, lo único que quieren es vivir tranquilos. En la Navidad de 2010, un grupo de ex componentes del «Coro Manín» decidió juntarse para cantar y amenizar las ceremonias parroquiales. El nacimiento del «Coro Llastrín» provocó cierto malestar en el director de la primera formación, Faustino Martínez. Y aquí entra el párroco local, Andrés Fernández, quien, de alguna manera, se vio obligado a sostener una vela que no era suya. Según aseguraron miembros del «Coro Llastrín», el sacerdote comenzó a recibir escritos en los que Martínez le recriminaba haber permitido al nuevo coro cantar en la iglesia de Santa María de Sábada y haber discriminado a la formación que él dirige, unos reproches que podrían haber provocado que el religioso se planteara la renuncia.

Martínez negó, a través de un comunicado, haber presionado ni insultado al cura y añadió que «es absolutamente falso que el "Coro Manín" y su director intenten echar a nuestro párroco don Andrés del pueblo». Aseguró además que contempla «con estupor la utilización que un grupo de personas hace de la buena voluntad y bondad del párroco para la guerra particular que desde el resentimiento, el odio y la manifiesta envidia contra el "Coro Manín" y su director se viene alimentando y jaleando». Desde el «Coro Llastrín» apuntaron que «siempre se respetó» a la veterana formación coral y se evitó pisar o solapar las actuaciones de ambos. Cuando tuvieron noticia de las presiones de Martínez hacia el párroco, varios de sus miembros pidieron reunirse con él «para atajar los problemas», una invitación que continúa sin respuesta un año después. Y siguen dispuestos a hacerlo, pero además han formado, junto a otros vecinos de Lastres, una plataforma para defender al párroco de unas tensiones y amenazas que aseguran han ido creciendo. El sacerdote, Andrés Fernández, explicó que siempre ha intentado «aunar esfuerzos, que nadie se sintiese excluido de la iglesia», y subrayó que los llastrinos «son capaces de unirse para cosas buenas, para cosas grandes. Que se unan para levantar el pueblo, que es lo más importante». La plataforma llevará a cabo su primera movilización mañana, en misa de doce, cuando colocarán unas hojas explicando que «el objetivo es apoyar y reforzar a don Andrés».