Pimiango (Ribadedeva),

Emilio G. CEA

Noventa alumnos de segundo de la ESO del Colegio de los Escolapios de Valencia visitaron ayer, con motivo de su viaje de fin de curso, la cueva de El Pindal, en Pimiango, en Ribadedeva. Durante la visita, los escolares recibieron una clase práctica sobre técnicas paleolíticas, impartida por José Aurelio García Munúa, junto a la ermita de San Emeterio, que dejó a los jóvenes con la boca abierta. Y es que no es lo mismo ver en los libros de texto del colegio las técnicas de caza empleadas por el hombre prehistórico durante el Paleolítico, y sus utensilios, que verlo, como hicieron ayer, en directo.

Munúa, quien durante años ha mostrado sus habilidades en varios talleres organizados en la cueva de Altamira, en Cantabria, impartió una clase teórica en la que explicó a los jóvenes las principales características de los utensilios prehistóricos reproducidos por él mismo, así como la forma como el hombre hacía fuego.

Las explicaciones se completaron con una clase práctica en la que Munúa enseñó a los estudiantes valencianos a utilizar un arco y unas flechas, así como a lanzar azagayas con un propulsor.