Arriondas (Parres),

P. MARTÍNEZ

Empezaron con cuatro puestos y ayer lograron reunir, en el cuarto mercado de solidaridad y comercio justo de Parres, a diez asociaciones y organizaciones no gubernamentales con un objetivo: ayudar a quien más lo necesita. La pista polideportiva del colegio río Sella de Arriondas fue el escenario final del mercado, inicialmente proyectado en el barrio de La Peruyal.

Pero el pronóstico de lluvia, que no falló, hizo que la organización tuviera que trasladar el mercado, sacrificando con ello centralidad y seguramente público. Sin embargo, la asociación «Cultura Indígena» prefirió ver el vaso medio lleno y aseguró que, «en proporción a la gente que hay, el mercado no va mal» y alguna cosa se vendió. También la recién creada asociación «Parres Kinshasa», que lleva tiempo funcionando como grupo.

Mayayu Muñiz, Esteban Gómez y las hijas del segundo, María y Claudia Gómez, se acercaron ayer por el puesto de «Parres Kinshasa», donde se podían comprar muñecas de lana de inspiración africana y mochilas de tela traídas de la República del Congo por la misionera parraguesa María Llamedo.

A Muñiz le gustó mucho el mercado, donde visitó el stand de «Médicos del Mundo», colectivo al que pertenece desde hace muchos años. Otras organizaciones nacionales con sede en la región como «Ayuda en Acción» o «Cruz Roja» también estuvieron en la cita solidaria y no faltaron colectivos locales como la asociación de personas con discapacidad «Emburria» o la de inmigrantes de Parres «Un Solo Mundo».

Elena García es la educadora de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Parres y aseguró que «la gente ya conoce la semana intercultural -evento que enmarca el mercado- y la feria y cada año vamos aumentando». A su juicio, los productos de comercio justo son «más interculturales, imposible, porque acercan otras realidades».

Además de una excelente oportunidad de comprar más justo y de conocer la actividad de estos colectivos, el mercado de ayer también ofreció dos horas de actividades para los más pequeños.