Oviedo/ Posada de Llanes,

-Urgen la apertura del Centro de Apoyo a la Integración de Arriondas, finalizado desde 2010, ¿tienen alguna fecha concreta?

-El director general de Políticas Sociales, Jacinto Braña, dijo que en quince días estaría habilitado. La licitación sería para marzo, pero están intentando buscar la fórmula legal para hacer la cesión, hasta el momento de la licitación, al centro Don Orione, para que los chicos estén en mejores condiciones.

-¿Creen que la gestión debería ser para Don Orione?

-Hombre, claro que lo creemos. Son los mejores trabajando con los chicos, es que no echamos de menos nada. Es una entidad religiosa, pero los trabajadores son de andar por la calle y bastante abiertos. En cuestión de discapacidad están a la última de todo y para ellos lo importante son los chicos, que es lo que nos mueve, tienen unos valores muy altos.

-¿Qué otras alternativas hay, quién lo podría coger?

-Se puede presentar cualquier otra empresa. A la hora de licitar hay que aportar unos certificados de calidad, que no tiene todo el mundo, porque si no habría más centros como Don Orione, que sería lo ideal. Creemos que eso vaya a primar, es lo que esperamos.

-¿A cuántos usuarios calculan que dará servicio el nuevo centro?

-Están previstos los treinta que hay actualmente y tampoco hay muchos más en espera, unos dos o tres. Los chicos que atiende Don Orione en Arriondas, en principio, son del Oriente, pero mi hermano por ejemplo es de Salas. Si la Consejería lo da de paso, sin problema.

-¿A qué achacan los más de dos años de retraso para abrirlo?

-Un poco a que el Gobierno del Principado estuvo tambaleándose. Empezamos a hablarlo con Alejandro Suárez, luego Foro Asturias no movió nada y ahora el PSOE lo volvió a mover. Y puede que haya coincidido con la crisis e igual la falta de voluntad política también dejó un poco que desear. Braña fue a verlo a últimos de agosto y nos recibió la semana pasada, sabía que para nosotros era prioritario, podía haberlo hecho otra persona, pero en su momento no lo hizo.

-¿Qué opinión tienen del trato que da la actual administración a su colectivo?

-De esta administración, lo que tengo que agradecer es la capacidad de diálogo que tiene Jacinto Braña y la accesibilidad, hacía mucho que no veía una persona así. Que puedas coger el teléfono, hablar con él y comentarle casos.

-¿Han notado los recortes que se están efectuando desde todas las administraciones?

-Sí se notaron. Por ejemplo ves que todo sube y a la hora de tener el precio de una plaza se dispone del mismo dinero que el año pasado. En el tema de medicamentos también, porque tienen unas pensiones pequeñitas. Si necesitan una muleta, una prótesis, todo eso ya te supone un dinero extra, no hay las ayudas que había. El lunes es el Día de la Discapacidad y entendemos que este año no hay nada que celebrar, tenemos que reclamar, ya es un colectivo con bastantes mínimos como para que encima recorten más.

-¿Tiene más dificultades una persona con discapacidad en la comarca del Oriente que en otra zonas urbanas del Centro?

-Por ejemplo los chicos de Don Orione son grandes privilegiados. El centro va a recoger a las aldeas a los que bajan al CAI de Arriondas que, si no, no los saca nadie de casa. El chico es el aliciente que tiene, puede ir y volver a su casa todos los días, y de momento eso es un lujo.

-¿Están las alas discriminadas respecto a la discapacidad?

-En profesionales, no nos quejamos. Sí nos quejamos en ofertas de empleo, que hay más en la zona centro, aunque hoy ya se van limando esas cosas. Las que hoy en día trabajan en la incorporación de la discapacidad son grandes empresas y pueden tener oficinas en cualquier parte de Asturias. El mayor problema es sacar al chico de su entorno, que suele ser bastante lejano, y bajarlo a un centro urbano como puede ser Arriondas, luego se desenvuelve bastante bien. También, en su día, convencer a los padres de que fuera de su casa le van a dar algo mejor de lo que le daban en casa, es muy difícil entenderlo.

-¿Es más difícil trabajar la discapacidad con una familia del entorno rural?

-La familia del entorno rural, si tú no vas a ellos, es más difícil que te soliciten ayuda. En el entorno urbano, por el hecho de tenerlo más cerca, es más fácil.

-¿Con qué otros equipamientos, además del Don Orione y el CAI de Arriondas, cuentan en la comarca?

-En el Oriente no hay nada más, por eso nuestra insistencia en que Don Orione continúe, porque no tenemos nada más y no queremos experimentos. No es un colectivo que necesite que le andes cambiando.

-¿Temen por la continuidad de Don Orione?

-A día de hoy sí, porque el futuro es un poco incierto dentro de este mundo. Por eso la asociación lucha porque se mantengan la calidad y los valores por encima del dinero. Que tampoco, porque no hay unas diferencias excesivas entre una plaza de Don Orione y una en otro centro. Con el gobierno de Foro hemos tenido bastantes dudas con la continuidad, por eso estamos contentos con Braña.

-El centro se ocupa de alrededor de un centenar de usuarios, ¿son todos los de la comarca o hay gente que sigue en casa?

-Hay gente que sigue en casa porque no hay sitio en el CAI de Arriondas. Y personas de sitios más lejanos a las que se les ofreció una plaza en Posada y lo consideran lejos. Ellos no lo ven como nos pasó a nosotros, como una universidad de la discapacidad. A nosotros nos costó, lo entiendo perfectamente.

Luchadora por su hermano

Pilar Conde nació en Villazón (Salas) en diciembre de 1967. Es la mayor de seis hermanos, entre los que está Iván, que nació en abril de 1980 con un 67 por ciento de discapacidad. Finalizó la EGB y se dedicó a cuidar a su hermano hasta que empezó a trabajar, primero cuidando niños y luego de dependienta en Oviedo. Reside en Lugones desde hace 22 años y como Iván está en el centro Don Orione de Posada de Llanes, Pilar es la presidenta de la Asociación de Personas con Discapacidad Intelectual del Oriente de Asturias (Asdor).