Cangas de Onís,

R. DÍAZ / J. M. CARBAJAL

Bankinter devolverá el dinero desaparecido a sus clientes de Cangas de Onís «sin esperas ni juicios», según avanzó ayer un portavoz de la entidad. El banco confía en cerrar «esta semana» la ronda de entrevistas con los alrededor de 30 o 40 afectados por las operaciones supuestamente fraudulentas del agente inmobiliario J. L. G. Bankinter, que está recibiendo a los perjudicados en una de sus oficinas de Gijón, aún no ha cifrado el montante total del dinero desaparecido, si bien la suma de las reclamaciones de los once afectados que han hablado hasta ahora con este periódico supone algo más de 500.000 euros.

Bankinter asegura que detectó las supuestas irregularidades cometidas por J. L. G. hace unas semanas. De inmediato, canceló su relación con el agente financiero, que no era empleado de la entidad y que también ofrecía productos y servicios de otras empresas. Asimismo, remitió cartas a todos sus clientes en Cangas de Onís y citó a aquellos en cuyas cuentas o productos observó indicios de irregularidades. También hubo varios clientes que, tras destaparse el escándalo, solicitaron reuniones con el banco para aclarar el estado de sus cuentas.

Bankinter está ofreciendo atención personalizada a todos sus clientes cangueses, con el objetivo de comprobar todos los movimientos de sus cuentas y los productos y servicios contratados, y determinar si hubo alguna operación fraudulenta. En aquellos casos en los que las irregularidades sean claras, Bankinter actuará de inmediato: devolverá el dinero a sus clientes, «sin esperas ni juicios», para evitarles pérdidas patrimoniales. Los abonos se realizarán «de manera prácticamente inmediata», señaló un portavoz de la entidad, que con posterioridad decidirá las acciones legales a emprender contra J. L. G.

Según los primeros indicios, el agente inmobiliario cangués pudo utilizar dinero de los clientes de Bankinter en su beneficio, al menos, durante los dos últimos años; algunos de los afectados aseguran que para invertir en Bolsa.

El escándalo que ha salpicado a Bankinter es el segundo que ha vivido Cangas de Onís en cinco meses. El pasado mes de agosto, el Banco Popular observaba irregularidades en las operaciones realizadas por el director de su filial Banco Pastor en la ciudad, M. M. C. El agujero económico se acerca en ese caso a los 5 millones de euros. Es el dinero que desapareció de las cuentas de unos 45 clientes del Pastor.

El Popular sólo ha devuelto hasta ahora el dinero reclamado a un puñado de afectados. La entidad ha puesto el resto de las reclamaciones en manos de la Policía y de los jueces. Algunos de los afectados del Pastor sopesan recurrir a la vía judicial para recuperar su dinero. Perjudicados por ambos escándalos se reunirán hoy con la idea de crear una plataforma conjunta.