El equipo liderado por el paleontólogo y profesor de la Universidad de Oviedo Diego Álvarez Lao extrajo de Jou Puerta 1.064 fósiles, que pertenecieron a 34 animales que vivieron entre 36.000 y 30.000 años atrás. Se hallaron diez especies distintas de grandes mamíferos, casi todos ungulados y entre los que hay ciervo común, ciervo gigante, corzo, bisonte, cabra pirenaica, rebeco, caballo, rinoceronte lanudo y mamut lanudo.

Estas dos últimas especies pertenecen a fauna glaciar, propia de climas más fríos y áridos de los que se daban en la zona en aquella época, que eran más templados. Esto, según los expertos, ocurrió por la huida hacia el Sur de Europa que emprendieron distintas especies, a medida que el clima en el continente se iba enfriando con la glaciación.

Álvarez Lao propone en el estudio paleontológico que estas especies sólo alcanzaron la península ibérica "ocasionalmente, durante los episodios más fríos del Pleistoceno, cohabitando con las faunas locales, en lugar de remplazándolas totalmente". En el yacimiento se encontró una cría de mamut lanudo y otros ejemplares juveniles, dos rinocerontes lanudos de seis a siete años y un ejemplar de esta misma especie con un húmero de tamaño y robustez extraordinarios.

El rinoceronte lanudo tiene en la cueva llanisca uno de los conjuntos más ricos de la península, pues se hallaron 105 restos de tres ejemplares. Además, hay fósiles de un ciervo gigante, el mayor que existió en la historia de la evolución. Los huesos extraídos están en una cesión temporal en la Universidad de Oviedo, hasta que se concluya el estudio y posteriormente se depositarán en el Museo Arqueológico, también de la capital asturiana.