La anulación de la licencia que permitió agrupar tres fincas y posibilitó la ampliación del hotel Kaype, en Barru (Llanes) es el primer capítulo de una polémica que tiene otros frentes pendientes. De un lado, está a punto de emitirse la sentencia definitiva sobre la licencia de obras, que un Juzgado de Oviedo ya declaró nula en septiembre. En este caso la denuncia partió del mismo vecino que recurrió la agrupación de fincas, Ignacio Fernández. Otro frente abierto es la denuncia contra esa misma licencia de obras presentada por el Gobierno del Principado, al negarse el Ayuntamiento a revisarla y adaptarla a la legislación vigente. Esta iniciativa provocó la paralización de las obras en octubre y está pendiente de la primera sentencia. Además, la Fiscalía denunció por la vía penal a dos funcionarios municipales -el arquitecto, Ángel Ramí, y el secretario, Santiago Fernández- por un presunto delito contra la ordenación del territorio.