Cangas de Onís vivió su San Antoniu más multitudinario. Cientos de personas, vestidas con el traje regional, tomaron las principales calles de la ciudad para participar en la procesión en honor a su patrón. La coincidencia de festividad en fin de semana añadido al gran esfuerzo desempeñado por la Sociedad de Festejos de Cangas de Onís (SFC) fueron clave para batir récords de asistencia.

Los voladores anunciaron el inicio de la misa en la capilla de San Antoniu, en Cangues d'Arriba, donde anoche tuvo lugar la joguera. Abajo, en la iglesia parroquial de Santa María, decenas de fieles esperaban la bajada del santo, que llegó acompañado por la Banda de Gaitas Ciudad Cangas de Onís. También por varias mujeres que dejaron a los pies de la imagen flores en señal de agradecimiento. A mediodía dio comienzo la misa solemne, cantada por el Coro Peña Santa. La ceremonia fue oficiada por el párroco local José Manuel Fueyo, que contó con la colaboración de su antecesor en el cargo, Luis Álvarez. Decenas de mujeres se agolpaban a la salida de la iglesia para tocar la pandereta en honor a San Antoniu, "el nuestru". Entre ellas la canguesa Isabel Otero, que reside desde hace 28 años en Suiza pero no se pierde "por nada del mundo" las fiestas "porque son tan emocionantes que se te ponen los pelos como escarpias".

Seis fueron los ramos ofrendados, la mayoría por personas que atraviesan algún problema de salud. No faltó el de la calle San Pelayo portado por Celso el de la Sifonería, los Fifos, Luis Alberto Salcines o Luisín Aranda, al que se añadieron el ofrecido por Francisco Sarmiento, Mª José Cueli, los Mori, Belén Valdés o la mejicana Matilde Blanco. Iván Ania y Jaime Fernández "el de las televisiones", se encargaron de subastarlos junto al Robledal antes de la quema del xigante. La pasión que sienten los cangueses por San Antoniu es tan grande que vecinos como Vicente del Valle "Pulga", trabajador del sector hostelero, exigen por contrato librar cada 13 de junio. Algunos como los bebés Javier Rodrigo, Clara Camacho o Nora Rodríguez debutaron en la concurrida procesión. A sus 72 años también se estrenaba en los festejos visitantes como el escocés residente en Australia Jim Keny que como todos los fieles prometió volver.