Matías González Benavides (Gijón, 1952) es, desde 1994, el presidente de la Peña Bolística Reculta, con sede en La Calzada, en Gijón.
-¿Qué siente al recibir la peña que preside este premio?
-Para nosotros es el reconocimiento a una labor que llevamos haciendo desde hace setenta años. Es una labor muy importante de mucha gente, en la que han colaborado también instituciones como el Ayuntamiento de Oviedo o la Consejería. Una peña como ésta lleva mucho trabajo y mucho esfuerzo y gracias a ese trabajo y a ese esfuerzo hemos alcanzado los setenta años de historia.
-¿Esperaban este reconocimiento?
-Fue gran sorpresa total. Venía de vacaciones con mi mujer y unos amigos cuando recibí la llamada del presidente del jurado. Me quedé callado y en silencio de la emoción.
-¿Supone el premio un acicate para seguir trabajando por la cuatreada en Gijón?
-Sí, Este premio nos da más ganas todavía de continuar.
-¿Cuál es la salud a día de hoy de la peña bolística Reculta?
-Actualmente tenemos unos ciento quince socios, un equipo y doce fichas en todas las categorías. Debido a cuestiones de trabajo de los socios sólo mantenemos un equipo y competimos con él en la categoría de honor.
-¿Es difícil la supervivencia de una peña de cuatreada en Gijón?
-Requiere mucho trabajo y esfuerzo. En Gijón desaparecieron muchas peñas por cuestiones relativas, por ejemplo, al Plan General de Ordenación Urbana o a la construcción de infraestructuras.
-¿En pleno 2015, por dónde pasa el futuro de los bolos?
-Estamos en crisis. Nos está costando recibir ayudas. Los patrocinadores que tenemos los vamos manteniendo y a nivel general yo creo que las peñas están haciendo un gran esfuerzo por captar aficionados. Si se capta a los padres se conseguirá que los niños se acerquen hasta la bolera y viceversa.
-¿Sienten el apoyo de las instituciones públicas?
-Antes teníamos un mayor apoyo por parte del Ayuntamiento de Gijón y de la Consejería de Cultura. Ahora todos somos a pedir y los recortes se notan. Aún así tampoco tenemos queja.