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El Juzgado rechaza la petición de AVALL de derribar dos viviendas en La Talá

El fallo asegura que la sentencia que anula el plan parcial aún no era firme cuando se levantaron las casas y los vecinos reclamarán al Ayuntamiento

Terrenos de La Talá, en Llanes. E. G. CEA

El Juzgado de lo contencioso-administrativo número 2 de Oviedo ha desestimado el recurso en el que la Asociación de Vecinos de Llanes (AVALL) solicitaba que se declarasen nulas dos licencias de construcción en la finca de La Talá, concedidas por el ayuntamiento llanisco al amparo del plan parcial de esta zona, que fue anulado por el Tribunal Supremo en sentencia firme, y se impusiese la demolición de las dos viviendas afectadas. Esta resolución, que firma la juez decana Pilar Martínez Ceyanes, considera que la afección de una supuesta anulación "a terceras personas que no consta que actuaran de mala fe" y entiende, entre otros argumentos, que el hecho de que el plan urbano de Llanes haya sido anulado definitivamente en sentencia firme con posterioridad a la concesión de aquellas autorizaciones y a la finalización de las obras invalida la petición de los demandantes.

AVALL pretendía que los tribunales dejaran sin efecto dos licencias para construir en La Talá concedidas el 14 de noviembre de 2007. El trámite autorizaba la edificación de dos viviendas unifamiliares en la zona y la reclamación del colectivo vecinal se enmarca en su convicción de que el Ayuntamiento debió haber revisado de oficio las resoluciones y licencias que el municipio consintió con el respaldo del plan parcial de La Talá, tumbado por sentencia judicial. El recurso al tribunal, que AVALL emprendió al ver desoída su petición en el consistorio llanisco, pretendía que se impusiese a los propietarios "la obligación de restituir los terrenos a su estado original (...) con las consecuencias que le son inherentes y la demolición de lo indebidamente urbanizado", según detalla la sentencia. La juez estima probado que no se actuó de mala fe de acuerdo con la normativa vigente en el momento de la construcción, toda vez que la anulación judicial del Plan General de Ordenación de Llanes (PGOLL) que "dejó sin cobertura el plan parcial de La Talá" tiene fecha del 11 de abril de 2007, pero no fue confirmada por el Tribunal Supremo hasta el 4 de enero de 2011. Las licencias afectadas por la reclamación de AVALL se conceden en noviembre de 2007, pero la sentencia reprocha a la asociación de vecinos que no decidiese acometer la impugnación antes, mientras la obra estaba en curso. AVALL, afirma el tribunal, "conocía perfectamente la realización de esta actuación urbanística mientras se estaba llevando a cabo, por lo que hubiera podido impugnarla, evitando así que ganara firmeza y consiguiendo que la anulación del plan parcial de La Talá se trasladara a la misma".

Su conclusión dice que no cabe trasladar por esas razones los efectos de las resoluciones judiciales contra la ordenación urbanística de Llanes a estas actuaciones concretas. La sentencia, que tiene fecha del pasado julio, ha adquirido firmeza al no ser recurrida por ninguna de las partes. El asunto, sin embargo, no ha muerto. La propia sentencia rechaza los motivos que el Ayuntamiento dio en su momento a AVALL para no dar curso a su petición de revisar las licencias, de modo que la asociación ha decidido volver a plantear ante el consistorio la petición de que resuelva las impugnaciones de las licencias. Al decir del abogado de la agrupación, Javier Calzadilla, "a pesar de lo que diga el Ayuntamiento, no está finalizado el proceso en la vía administrativa" y "a día de hoy, el suelo de La Talá no tiene ninguna cobertura jurídica como urbano. Sigue siendo suelo rústico".

El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) anuló por dos veces (el 11 de abril de 2007 y el 30 de mayo de 2008) el plan parcial. El Ayuntamiento otorgó estas dos licencias en el área el 14 de noviembre de 2007 y las obras concluyeron en marzo y junio de 2009. Tanto en el momento de concesión de las autorizaciones como en el de finalización de las obras, el plan urbano había sido suspendido por el TSJA, pero las sentencias no habían sido confirmadas aún por el Supremo.

Es éste solamente uno de los frentes judiciales abiertos en torno a La Talá, considerada la "perla" del plan urbanístico de Llanes. También se debate si la actuación invade suelo de Costas. El equipo de gobierno de Llanes considera que no mientras la oposición entiende que sí.

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