"Las sentencias están para cumplirlas. Actuaremos, como no podía ser de otra manera, en base a lo que digan los jueces", apuntó ayer la concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Llanes, Marián García de la Llana, al respecto del fallo judicial, desvelado ayer por LA NUEVA ESPAÑA, que ordena respetar las dos viviendas construidas en La Talá a pesar de que el plan urbanístico de la zona fue anulado.
La sentencia desestima el recurso presentado por la Agrupación de Vecinos y Amigos de Llanes (AVALL), que pedía que se declarasen nulas sendas licencias de edificación concedidas por el Ayuntamiento de Llanes, gobernado en aquel momento por el PSOE, en base al polémico plan parcial de la Talá, tumbado en su momento por el Tribunal Supremo en sentencia firme. El colectivo vecinal sostiene que seguirá luchando para que las dos viviendas unifamiliares sean derribadas.
AVALL presentó el pasado 8 de octubre un escrito en el que solicita que el Consistorio llanisco resuelva las impugnaciones de las licencias concedidas en su momento en La Talá, las declare nulas y ordene la demolición de las mismas y la restauración del suelo a su estado original. El Ayuntamiento aún no ha contestado. En la resolución judicial, la magistrada Pilar Martínez Ceyanes tiene en cuenta la afección de una supuesta anulación a "terceras personas que no consta que actuasen de mala fe" y entiende que el hecho de que el PGO de Llanes haya sido anulado en sentencia firme con posterioridad a la concesión de aquellas autorizaciones y a la finalización de las obras invalida la petición de los demandantes.
"Seguiremos pidiendo el derribo. Ambas viviendas están fuera de ordenación", aseguró ayer la secretaria de AVALL, María José Rodríguez. La edil de Urbanismo en el Ayuntamiento de Llanes, Marián García de la Llana, asegura que está a la espera de tener en su poder los informes técnicos y jurídicos para pronunciarse respecto a la solicitud de AVALL de resolver las impugnaciones de la licencias.
"Este proceso, a nuestro modo de ver, no está aún cerrado. Para nosotros lo más importan es que el suelo de la Talá es rústico. En el mejor de los casos, ambas viviendas quedarán fuera de ordenación. En este lugar no se podrá construir ninguna vivienda más y las dos existentes tan sólo podrán conservarse", subraya el abogado de AVALL, Javier Calzadilla. Una vez el Ayuntamiento de Llanes resuelva sobre el tema de las impugnaciones de la licencias, el colectivo vecinal evaluará la decisión tomada al respecto y se reservará, según manifestaron ayer, el derecho de ir al juzgado "si fuese necesario". AVALL destaca también que la gran victoria en la guerra urbanística de La Talá fue, para ellos, cuando se anularon el Plan Parcial y el PGO.
Por su parte, José Herrero, del PSOE, se congratula porque la sentencia "que le quita la razón a AVALL es una buena noticia para el Ayuntamiento de Llanes".
El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) tumbó en abril de 2007 y en mayo de 2008 el plan parcial de La Talá que promovía la urbanización de la "perla" del plan urbanístico de Llanes. El Consistorio llanisco otorgó las licencias de construcción de los dos chalés en noviembre de 2007. En el momento en que se dio el permiso el plan parcial había sido suspendido por el TSJA, pero las sentencias no habían sido confirmadas por el Tribunal Supremo.
