"Fue un susto muy gordo. La verdad es que volvieron a nacer". Así se pronunció ayer un familiar de una de las tres jóvenes de Caravia de 18, 19 y 20 años que resultaron heridas, una grave, cuando volcaron con su coche al regresar a casa de madrugada tras pasar la noche del viernes de fiesta en Cangas de Onís. El turismo -con matrícula 2859 HHV- se salió de la carretera nacional 625 y volcó en Vega los Caseros (Parres). El coche quedó volcado fuera de la carretera después de chocar contra el quitamiedos del carril contrario, llevarse por delante los maderos de la valla de la senda peatonal y arrastrarse unos 50 metros por el suelo.
La peor parada fue la conductora, de iniciales C.P. La joven quedó atrapada e inconsciente dentro del vehículo y tras ser excarcelada por los Bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (Sepa) fue trasladada con un traumatismo craneoencefálico al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en Oviedo, donde al cierre de esta edición permanecía ingresada aunque estable, con serias lesiones en un ojo.
Las otras dos ocupantes del vehículo fueron trasladadas al hospital de Arriondas donde permanecieron toda la tarde en observación aquejadas de contusiones de carácter leve, según explicaron los familiares.
El hermano de L.L., la chica de 19 años que iba de copiloto, informó de que la caraviense estaba bien y sólo necesitó un collarín por el golpe. En la sala de Urgencias coincidió con el padre otra de las heridas, A.B., que contó que su hija recibió un punto en la ceja y sufría fuertes dolores en una muñeca. "Dentro de la mala suerte tuvieron suerte. Podían haber sufrido daños peores", contó visiblemente afectado.
Las tres jóvenes amigas suelen acudir los viernes hasta Cangas de Onís, día en que la ciudad goza de un gran ambiente nocturno. "No nos explicamos qué pudo ocurrir, si fue que se despistaron o que tomaron mal la curva", comentaron los familiares a la espera de hablar con las jóvenes, que estuvieron todo el día en el hospital a la espera de recibir el alta a última hora de ayer.
El Centro de Coordinación de Emergencias recibió el aviso del accidente poco antes de las seis y media de la madrugada. Hasta la zona se desplazaron tres bomberos con el furgón multisocorro. Una vez localizado el vehículo, procedieron a levantarlo con puntales para acceder a dos de las accidentadas que se encontraban atrapadas en el coche volcado, según informó el Sepa. A continuación retiraron la puerta trasera derecha del coche y quitaron los respaldos de los asientos para, tras inmovilizar con collarín a las afectadas, sacarlas con la tabla de rescate. Los bomberos dieron por finalizada la intervención al llegar a sus instalaciones de Cangas de Onís a las ocho.
No es la primera vez que se producen accidentes en este punto, justo en el límite del concejo de Parres y Cangas de Onís y considerado como uno de los negros de la carretera nacional. De hecho, el Ministerio de Fomento ya anunció su intención de construir una rotonda cerrada en el cruce próximo que conecta con el Parador de Villanueva de Cangas con el objetivo de reducir la siniestralidad. Aunque no hay plazos fijados para la ejecución de la obra, el regidor cangués, José Manuel González Castro, confía en que la rotonda sea una realidad antes de que finalice 2016. La medida se enmarca dentro de un plan para mejorar las condiciones de seguridad de nueve cruces y enlaces de las carreteras en el Principado y tendrá un coste de 197.177 euros.
