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El comodín de las mamás en apuros

La asociación "Red de Madres Sin Red" inicia su andadura en Piloña con una campaña de apoyo a las refugiadas sirias que incluye un mercadillo solidario

Enrique Granda, Helena Vilar y Susana Soto presentan la asociación "Red de Madres Sin Red" en la Casa de Cultura de Infiesto, ayer. C. CORTE

Orientar y proporcionar ayuda inicial a madres con hijos y en apuros el objetivo prioritario de "Red de Madres Sin Red", una asociación piloñesa sin ánimo de lucro que ayer se dio a conocer en Infiesto. Su presidenta, Helena Vilar, matizó que el colectivo prestará apoyo a todos los que lo necesiten aunque centrará sus primeros pasos en ayudar en concreto a las refugiadas sirias. En este sentido, hizo un llamamiento a la población para que aporte su granito de arena con recursos económicos y humanos. Latas de comida sin cerdo, mantas, leche infantil en polvo, material escolar, pañales para niños y artículos de higiene femenina son algunas de los materiales que precisan con mayor urgencia.

Para recaudar más fondos, la asociación promueve del 5 al 8 de diciembre (ambos inclusive) un mercadillo solidario de artesanos en la capilla de El Prial, en Infiesto. "Con cada chapa que vendemos a un euro conseguimos una manta térmica y media para un refugiado", ejemplificó. Vilar recordó que quien quiera ayudar puede hacerlo a través del teléfono 657278501 o del correo.

Las aportaciones de la asociación llegan a los más necesitados a través de Proactiva Open Arms, una ONG de Badalona compuesta por socorristas en paro que en septiembre se trasladaron a la isla de Lesbos para ayudar a los refugiados que llegan a la costa griega. El transporte del avituallamiento lo realizan a través de la Fundación Seur y Mensajeros de la Paz y les sale gratis gracias a las gestiones realizadas por el profesor y vecino de Parres Agustín García, uno de los impulsores del movimiento ciudadano "Bienvenidos refugiados", con el que colaboran.

Como novedad, todos aquellos que hagan donaciones a la asociación "Red de Madres Sin Red" podrán conocer quién, cuándo y dónde recibe la ayuda prestada a través de un correo electrónico. "No se trata de hacer socios y presionar para que paguen una cuota mensual sino de conseguir voluntarios que vayan haciendo aportaciones", contó la presidenta, que hizo un repaso sobre "el drama terrible que desde 2011 vive la población siria". Una guerra en la que, según explicó, "las madres y los niños, que son el futuro, se utilizan como moneda de cambio y es difícil que no sean violados en los campos de refugiados".

Vilar, que tildó de dictador progresista al presidente sirio, Bashar al-Asad, lamentó que Occidente "armara de forma no oficial al Estado Islámico" y que España no facilitara más la acogida de refugiados "En los seis meses que tienen la tarjeta roja no pueden tener empleo y cuando se les acaba apenas tienen 15 días para resolver su situación, por eso estamos aquí, para ayudarlos a arrancar, no por caridad", matizó.

En el acto de presentación de "Red de Madres Sin Red" también intervino Susana Soto, de Villaciciosa con los refugiados. Ella misma cedió una casa rural para acoger a las familias de refugiados que están por llegar "para ejemplificar que aunque no tengamos mucho tiempo o dinero todos podemos ayudar de una u otra forma", aclaró. En la misma línea se expresó, Enrique Granda, tesorero de la asociación piloñesa, que además cedió un local para el colectivo en Mestres. "En Europa hay 700.000 desplazados y tenemos que vencer el miedo del ellos-nosotros", apuntó.

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