La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Sustituir el matorral por árboles daría a la comarca un 33% más de ingresos

El ingeniero Iñaki Aranzeta calcula que Ribadesella obtendría 829.517 euros al año si vendiera las castañas y boletus que crecen en su suelo

Si aprovechara su riqueza forestal, el concejo de Piloña podría obtener cada año 3,8 millones de euros, o lo que es lo mismo el 84 por ciento de su presupuesto de 2014. Parres podría obtener 1,52 millones, un 31 por ciento de sus cuentas de 2013, y Llanes generaría una riqueza de 2,34 millones, un 14 por ciento de lo que ha tenido para gastar este año.

Son cifras extraídas del informe que el ingeniero Iñaki Aranzeta elaboró motivado por el grupo de círculos de Podemos de la comarca del Oriente, en el que ha calculado cuánto obtendrían Colunga, Llanes, Parres, Piloña, Ribadesella, Cabrales y Cangas de Onís. Los porcentajes varían pero, de media, se generarían unas rentas, hoy inexistentes, equivalentes al 33 por ciento de los presupuestos municipales de estos concejos.

Aranzeta parte de que "el 30 por ciento de la superficie forestal de la comarca, algo más de 43.000 hectáreas, están ocupadas por el matorral" y plantea un esquema de aprovechamiento para el 40 por ciento de esta superficie, la que tiene una pendiente inferior al 60 por ciento y por tanto se puede trabajar con máquinas. Si en lugar de matorral crecieran unas determinadas especies y los municipios vendieran la madera y los frutos, los vecinos obtendrían los beneficios antes mencionados. Al brezo y el tojo le sustituirían el castaño (en un 16 por ciento del terreno) el abedul y el roble americano (en un 13 por ciento), y el pino radiata (en un 8 por ciento), aunque las especies o proporciones podrían variar según los lugares.

Sólo con la renta generada por esta madera en las 3.298 hectáreas que en Llanes ocupa el matorral con la pendiente requerida, ya se obtendrían 439.788 euros, un 46 por ciento de lo generado por las cortas forestales en 2013. El ingeniero calcula, además, que sumando esta producción "más la generada por la venta de castaña y boletus" en un 4 por ciento adicional de terreno, el beneficio anual ascendería a los 2,34 millones. En Ribadesella, las 1.094 hectáreas de matorral podrían dar unos beneficios de 155.611 euros, un 37 por ciento de los ingresos forestales de 2013. Si a esto se le suma la venta de castañas y boletus, el concejo podría obtener unos beneficios anuales de 829.517 euros, un once por ciento del presupuesto de 2014. En Cangas de Onís también podrían sacar buen partido de las 2.741 hectáreas de matorral con la pendiente establecida por el informe, de las que obtendrían 219.307 euros (un 9,97 por ciento de lo cortado en 2013), una cantidad que la recolección elevaría hasta el 1,16 millones de euros, un veinte por ciento de lo que el concejo cangués tuvo para gastar en 2014.

Compartir el artículo

stats