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Cangas de Onís restaurará la estela conmemorativa de la muerte del rey Favila

Los vecinos de Llueves llevan años solicitando atención para la inscripción

Pipo Fernández, José Carbonell y José Antonio Alonso señalan la estela conmemorativa de la muerte de Favila. C. C.

La estela de Llueves que conmemora la muerte del rey Favila tras un ataque de un oso será objeto de una restauración próximamente. Así lo confirmó el alcalde de Cangas de Onís, José Manuel González Castro (PP), después de que varios vecinos expresaran en LA NUEVA ESPAÑA su malestar por el estado de abandono que sufre el monumento.

"Pediremos presupuesto para ver cuánto cuesta restaurar la piedra en la que está grabada la Cruz de Favila", aseguró el regido cangués. González Castro recordó que miembros del Taller de empleo ya colocaron en su día una señalización en la zona con la historia del monarca y limpiaron la parte concerniente al terreno público "que linda con una propiedad privada donde no podemos actuar", resaltó. El regidor explicó que la Oficina de Turismo promociona la ruta de Favila, que pasa por Villanueva, Llueves y la capilla de Santa Cruz. "Nuestro objetivo es restaurar la piedra y que tenga un mantenimiento constante porque es un activo rico y con mucho valor para el concejo", apostilló.

Los vecinos de Llueves llevan años reclamando una mejora en el mantenimiento y señalización de la estela. "Acabamos haciendo de guías para los numerosos turistas porque está comido por la maleza y dar con esta caleya es difícil", esgrimieron.

Las crónicas medievales relatan que Favila, que reinó entre 735 y 737, fue asesinado por un oso en Llueves mientras cazaba. La inscripción en la roca que hoy se puede contemplar en la localidad fue mandada grabar por los duques de Montpensier, Antonio María Felipe de Orleans y Luisa Fernanda de Borbón (hermana de la Reina Isabel II) durante la visita que realizaron a Covadonga en 1857. El grabado, casi invisible hoy en día, sustituye a una cruz de madera que durante siglos señaló el lugar del trágico accidente del rey, aunque varias fuentes apuntan a que pudo tratarse de una muerta producida a causa de la lucha por el poder. Hasta Llueves se desplazan cada año miembros del Ateneo Republicano de Asturias para homenajear al plantígrado, que consideran el primer republicano español de la historia. Lo hacen sacando en procesión a un gran oso de peluche.

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