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Las vacas de Llueves, en busca y captura

La Consejería de Desarrollo Rural y el Ayuntamiento de Cangas de Onís emprenden una infructuosa batida para prindar a la treintena de reses errantes que llevan años molestando a los vecinos

Las vacas de Llueves, en busca y captura

A las vacas errantes de Llueves no hay quien las prinde. La Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales inició ayer en colaboración con el Ayuntamiento de Cangas de Onís una batida para atrapar a la treintena de animales que llevan varios años incordiando a los vecinos y destrozando sus prados. Pero los siete efectivos que participaron en la batida fueron incapaces de aprisionar a las huidizas reses. Y eso que al principio el operativo comenzó muy bien. Las vacas fueron localizadas a primera hora de la mañana y conducidas hacia la capilla de Llueves, donde por su ubicación estratégica era más fácil montar una manga con vallas metálicas para atraparlas. A escasos metros del edificio religioso, la aparición de un perro, entre otras cosas, hizo que las reses se pusieran nerviosas y huyeran despavoridas del pueblo. Las vacas errantes pusieron rumbo a Celangu, donde vive su dueño, y fue imposible pescarlas. El propietario increpó a los encargados de prindar a los animales, produciéndose momentos de tensión que obligaron a intervenir a la Guardia Civil. Entre los participantes en la batida se encontraba el concejal cangués de Medio Rural, Gonzalo Suero, quien aseguró que el Ayuntamiento "está haciendo un esfuerzo máximo para acabar con el problema" .

"Esta es una primera toma de contacto pero seguiremos actuando a diario hasta atraparlas", contó. Una vez que esto ocurra, los animales serán trasladados al mercado de ganado de Cangas y saldrán a subasta tras ser saneadas. El director general de Ganadería, Ibo Álvarez, visitó al dueño de las reses en octubre para convencerle de la necesidad de sanearlas pero las negociaciones no fructificaron y el propietario sólo presentó a los veterinarios la mitad de las vacas, por lo que se inició el expediente de prindaje. La Consejería indicó que varios efectivos realizaron ayer una inspección por el monte de Onao "que es donde tenemos competencia" sin localizar al ganado.

Los vecinos de Llueves llevan años pidiendo solución para las vacas errantes que, especialmente al anochecer, ocupan fincas, rompen cercos, destrozan huertas y defecan por los caminos públicos. "Apreciamos el esfuerzo que está haciendo el Ayuntamiento, fue cuestión de mala suerte que no las pudieran agarrar pero que lo solucionarán a la mayor brevedad posible", dicen los vecinos.

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