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MANUEL ROZA | Presidente de la Asociación de Conservadores del Asturcón del Sueve (ACAS)

"Los gamos están bajando a las fincas porque el pasto escasea en el Sueve"

"Comercializar la carne de asturcón sería una buena salida para los potros, porque hay criadores que no quieren que las yeguas paran más"

Manuel Roza, con la sierra del Sueve al fondo. P. M.

Manuel Roza (Libardón, Colunga, 1967) es el presidente de la Asociación de Conservadores del Asturcón del Sueve (ACAS) desde hace ocho años, además de cantante de tonada asturiana y vocal en la Sociedad de Fomento de Libardón y en la comisión local de festejos.

-Reclama unas fechas de subida y bajada de los animales al puerto del Sueve, como ocurre en Covadonga. ¿Qué se conseguiría con esto?

-Sería la manera de que cada uno tuviera en el puerto lo que pudiera alimentar abajo, porque en invierno los animales tendrían que bajar. El que tenga treinta yeguas en el Sueve quizás se vería obligado a tener diez, porque a lo mejor no tiene fincas para alimentarlas a todas cuando bajen. Por ejemplo, en la asociación tenemos unos veinte caballos y no podemos tener más por culpa del invierno, porque abajo los alimentamos en una finca y luego a pienso y paja. Tener más y dejarlos arriba en el puerto no sería lo correcto.

-El prindaje llevado a cabo por la Junta de Cofiño concluyó con una decena de caballos capturados. ¿Cree que hay muchos más por la comarca?

-A "Indomable", el caballo que se ha intentado montar en la Fiesta del Asturcón durante los cinco últimos años, intentaron cogerlo porque había otras yeguas con él, pero escaparon todos. Para la fiesta de Espineres empezamos cuatro días antes por si hay fallos, la última vez fuimos dieciséis personas.

-¿Dónde nació este caballo de leyenda?

-Nació en el Cuetu l' Otru, en el monte del Altu la Llama, en estado salvaje. Y lo compró la asociación a un criador, lo marcamos e identificamos y lo soltamos en aquella zona. Vimos que reunía cualidades innatas para la doma, como seguro que alguno de los que se bajaron estos días tendrá también.

-¿Cuándo nació la tradición de intentar montar a uno de estos caballos salvajes?

-Nació con la fiesta, allá por el año ochenta. Empezó a hacerse después de la comida de hermandad, pero con caballos no tan salvajes como estos. Se vio que era una cosa divertida y que gustaba y ahora, que la fiesta ha crecido bastante, la gente espera especialmente este momento. Antes de "Indomable" hubo un "Moro" que murió con diecisiete años. Intentando domarlo me rompí yo un brazo, en el año 1992, y lo dejé para siempre, con 23 años.

-¿Ganó alguna vez, logró subirse al caballo?

-Sí, logré ganar tres veces. Pero aquella, con "Moro", bajé directamente de Espineres para Arriondas, y nunca más.

-La asociación que preside nació en 1979 en un momento en que la raza corría peligro. ¿Por qué?

-Los ganaderos traían caballos de fuera y los mezclaban con los de aquí para que el potro, en lugar de 5.000 pesetas, lo que valía de aquella, se vendiera por el doble porque se aprovechaba para carne. Entonces, un grupo de vecinos de Borines, Cerecea, Libardón y otros pueblos, que eran ganaderos y amigos, vieron que el asturcón desaparecía y fundaron la asociación. Tuvieron que empezar comprando para garantizar la genética de asturcón.

-¿Está asegurada hoy en día la continuidad de la raza?

-Sí, está asegurada la supervivencia. Hay sobre 2.500 animales en el censo general, en toda España.

-¿Necesita más ganaderos que apuesten por ella, más ayudas de la Administración?

-Sí hace falta que la gente apueste por ella y también un poco más de ayuda de la Administración, que es muy importante para poder mantener a los caballos por el invierno. Antes se vendían para otras provincias, pero ahora los hay por todos lados y los precios son muy bajos.

-¿Para qué se vendían?

-Pues no lo sé, será por la belleza que tienen o por las características. Nosotros los vendimos en Mallorca y sé que hay un criador en Ávila. Hay asturcones en todo el territorio, lo que no sé es si tendrán ayudas fuera de Asturias.

-¿Qué características definen al asturcón?

-Se usa para doma en los hipódromos, para empezar los niños, y para la terapia de los que tienen dificultades. Es un caballo de alzada de 1,2 o 1,4 metros, un poni. Es súper noble al trato, el mito de "Indomable" es porque está salvaje y sólo se usa para la fiesta. Pero domesticado es un caballo con un trato exquisito.

-¿Es partidario de que se comercialice la carne de asturcón?

-Sería buena salida para los potros, porque hay mucho criador que ya no quiere más. Sería una forma de que las yeguas siguieran pariendo, porque ahora mismo no hay salida para los potros. Sé que lo está intentando la Asociación de Criadores de Ponis de Raza Asturcón (ACRPA), que tiene ámbito regional y son los que velan por el mantenimiento de la línea genética.

-¿Es fácil engañar y vender un caballo cruzado por un asturcón?

-No, es muy difícil. Con la cantidad de pruebas que hacen es muy complicado hacer trampas. Al mes de nacer ya tienes que dar parte de nacimiento y a los seis poner el microchip. Nosotros, para garantizar que no haya cruces, cubrimos a las yeguas abajo para que ya suban preñadas y no haya riesgo.

-Hay quien dice que los caballos sin dueño no suponen el auténtico problema del Sueve, sino que son los gamos. ¿Qué opina?

-El Sueve necesita menos gamos, que comen y compiten por el pasto, y más limpieza, porque están quitando hectáreas porque es todo matorral. Soy partidario de que se hagan controles de población de los gamos, que además están bajando a las fincas de los pueblos. Y el que baja no vuelve a subir al Sueve.

-¿Por qué?

-Porque arriba hay escasez de pasto y los praos de abajo están abonados. A los que nos gusta andar a cuernos, ahora que es época de que los gamos los suelten, sabemos que los mejores están en las fincas y las zonas bajas. Y estos gamos ocasionan daños, claro.

-Es aficionado a la canción asturiana desde que era niño, aunque empezó a participar en concursos hará unos quince años. ¿Cómo ve el resurgimiento que está experimentando esta disciplina, con la incorporación de las nuevas generaciones?

-El resurgir que tiene es muy bueno, ahora hay gente joven y muy preparada, tienen profesores y van a clases. Por ejemplo aquí en Colunga las da Lorena Corripio, de Carrandi. Nosotros empezamos a nuestro modo, cuando yo empecé casi era de los más jóvenes y tenía más de treinta años. Ahora hay niños de nueve o diez años que lo bordan ya.

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