Una tienda de telefonía móvil situada en la calle Pidal de Llanes sufrió en la madrugada del pasado jueves un espectacular robo mediante la técnica del alunizaje. Los amigos de lo ajeno empotraron un coche contra el escaparate del negocio para, posteriormente, hacerse con buena parte de los teléfonos móviles que había en su interior. Se trata del segundo asalto que sufre este negocio en menos de un mes.

El alunizaje se produjo sobre la una y media de la madrugada del viernes, cuando un enorme estruendo alarmó al vecindario. Una patrulla de la Guardia Civil hizo acto de presencia en el lugar escasos minutos después del suceso. El Instituto Armado puso en marcha un dispositivo de búsqueda para atrapar a los responsables del asalto, que finalizó horas más tarde sin éxito.

El pasado 12 de abril, los delincuentes también hicieron de las suyas en este local. En aquella ocasión el robo tuvo lugar al filo de los cuatro y media de la madrugada, tras reventar la puerta de la tienda, llevándose los cacos, además de varios teléfonos móviles, la caja registradora, en cuyo interior había 150 euros. "Estamos cansadas de tanto robo. Ojalá no se vuelva a repetir", aseguraron las resignadas empleadas de esta tienda de telefonía llanisca.