El Ayuntamiento de Cabrales revocó ayer por unanimidad la adjudicación de la gestión de la residencia de ancianos de Poo, un edificio que acabó de construirse en 2011, pero que sigue cerrado a cal y canto. La anulación de la adjudicación fue posible gracias al respaldo del Grupo Municipal Socialista, cuyo portavoz, José Sánchez, aseguró que él y sus compañeros votaban "cerrando los ojos" y con un único objetivo: no entorpecer más la apertura del edificio y que funcione lo antes posible.

La propuesta para revocar la adjudicación de la residencia, aprobada también por unanimidad hace unas semanas, fue presentada por el equipo de gobierno, que integran PP, Foro y somos Cabrales, tras renunciar y rechazar la firma del contrato la empresa adjudicataria, la misma que gestiona la residencia Sierra del Cuera en Posada de Llanes. La empresas justificó su rechazo a asumir la gestión de la residencia de Poo con un único argumento: no le salían las cuentas.

El PSOE cabraliego preguntó sobre la posibilidad de reclamar daños y perjuicios a la empresa por su repentina renuncia -el mismo día que iba a firmarse el contrato definitivo- a lo que los servicios jurídicos municipales contestaron que sí, pero que habría que valorar esos daños y perjuicios y que serían escasos, de apenas unas decenas de euros. "Más que la cantidad importa el hecho, y que aquí no estamos para perder el tiempo", señaló Sánchez. Al final todo quedó en una queja y no habrá reclamación.

El equipo de gobierno, encabezado por el alcalde, Francisco González (PP), propuso rehacer el pliego de condiciones de tal manera que se favorezca la concurrencia de más empresas (en la anterior convocatoria solo se presentó una, la que luego rechazó la adjudicación).

Con este objetivo, el Ayuntamiento modificará el punto más cuestionado por la adjudicataria: la exigencia de que haya dos vigilantes en la residencia por las noches, cláusula que propuso en su día el PSOE y que aceptó el equipo de gobierno. El nuevo pliego establecerá un sistema de guardia localizada: un vigilante nocturno en el centro y que otro pueda acudir en menos de veinte minutos en caso de necesidad.