El cuatripartito de Llanes sopesa la posibilidad de abandonar la negociación abierta con los sindicatos y aprobar de manera unilateral la negociación para la modificación de la relación de puestos de trabajo (RPT) que pretende acometer en el Ayuntamiento. La modificación de la RPT propuesta por el cuatripartito contempla la amortización de varias plazas y la supresión de dos (una a media jornada y otra a jornada completa).

La quinta reunión de la mesa de negociación ayer celebrada concluyó con los representantes sindicales de UGT saliendo del viejo salón de Plenos antes de aprobarse el acta de la sesión anterior. UGT dará hoy explicaciones sobre lo ocurrido, aunque el edil de Personal, Javier Ardines, dio a entender que los representantes del sindicato socialista abandonaron la negociación molestos, al conocer el cambio de representante de CC OO en la mesa. "Mostraron su malestar por ello. Nosotros no pudimos informar antes porque la notificación se presentó hoy por la mañana (por ayer)", señaló Ardines.

Roberto Lucas como titular y Rogelio Marotías como suplente -este último fue quien ayer acudió a la reunión- serán a partir de ahora los representantes sindicales de CC OO en este proceso. Primero UGT protestó porque no había nadie de CC OO en la mesa, y ahora muestra su malestar porque el representante no les gusta y le acusaron de ser afín al equipo de gobierno", criticó Ardines. El edil de Personal volvió a cargar una vez más contra UGT y sus representantes sindicales: "lo ocurrido no nos ha extrañado. No tienen voluntad de llegar a ningún tipo de acuerdo", indicó.

Los nulos avances en la quinta reunión de la mesa de negociación pueden haber terminado con la paciencia del cuatripartito. "La ley obliga a negociar una modificación de puestos de trabajo pero no obliga a llegar a acuerdos. Esto se está dilatando en el tiempo y hay una estrategia clara por parte de UGT para que esto siga así. Todo tiene su principio y un final", señaló Javier Ardines, quien aseguró que el cuatripartito se reunirá en los próximos días para definir la estrategia a seguir a partir de ahora. "Valoraremos si merece la pena seguir con la negociación o llevar la modificación a Pleno", comentó.

El edil de Personal asume que la regulación laboral puede terminar en los tribunales. "No nos cogería por sorpresa", manifestó. "Esto no es una negociación sindical, son maniobras políticas. El PSOE ha mandado a UGT torpedear el normal funcionamiento del Ayuntamiento", añadió.