Mejorar y unificar la señalización del Camino de Santiago, regular la situación de los albergues y desarrollar una estrategia conjunta multidisciplinar para potenciar la ruta jacobea del Norte, a su paso por el oriente de Asturias y el occidente de Cantabria. Estas y otras cuestiones se pusieron ayer encima de la mesa en el salón de actos de la Casa de Cultura de Llanes, durante el transcurso de una mesa de trabajo sobre la ruta jacobea convocada la asociación llanisca de Amigos del Camino de Santiago "El Borbón".

La directora general de Patrimonio, Otilia Requejo, subrayó la importancia de estos encuentros "para mantener un contacto con la gente implicada en el Camino y conocer de cerca toda la problemática relacionada con la gestión del mismo". Requejo manifestó que la principal preocupación para la Administración autonómica en relación a la ruta jacobea está relacionada con su señalización. "Queremos estar coordinados con las asociaciones y los ayuntamientos para señalizar de la manera más rigurosa el Camino. En este sentido, estamos también en contacto con las comunidades de Cantabria y Galicia para seguir una política común", indicó. La apuesta del Principado para la ruta jacobea pasa por un plan especial que implica a diez direcciones generales en la organización, ordenación y difusión en Asturias de ese patrimonio mundial.

Javier Sampedro, técnico del área de Cultura del Ayuntamiento de Ribadedeva, acentuó la necesidad de poner en orden la señalización, a veces caótica, que ha quedado tras las obras de la autovía del Cantábrico. Anunció que el Camino de Santiago a su paso por el municipio de Ribadedeva tendrá gran protagonismo dentro del Plan General de Turismo que el Consistorio está redactando pues, según explicó, la ruta jacobea es "el principal foco de atracción turística de visitantes extranjeros que tenemos".

La concejala de Cultura del Ayuntamiento de Llanes, Marisa Elviro, incidió en la importancia de que el albergue de Po (Poo), propiedad del Principado y cerrado, se reactive. Elviro señaló que el Ayuntamiento está ejecutando la retirada de la señalización ajena a la ruta, y pidió más implicación para que se vinculen de una manera más cercana a la ruta algunos monumentos, como por ejemplo, San Antolín de Bedón.

Miguel Ángel Laredo, representante de la Mancomunidad de la Comarca de la Sidra, destacó la necesidad de poner al día la ruta y acabar "con las barrabasadas que se hicieron por la construcción de la autovía". Los representantes de Gijón plantearon la posibilidad de sustituir la actual concha indicativa por otro distintivo debido "a lo poco atractiva que es y a su fragilidad. Seria mejor colocar placas que tengan mayor viveza", aseguraron.