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El maratón man llanisco

Ángel Sánchez Peón, de 60 años, ha conseguido con el combinado español la medalla de plata por equipos en el Campeonato de Europa en ruta de veteranos

Ángel Sánchez Peón con la medalla de plata que ganó en Portugal y la camiseta del combinado español. RAMÓN DÍAZ

El deporte ha sido y es parte consustancial de la filosofía vital de Ángel Sánchez Peón, un llanisco de 60 años que acaba de conseguir en Portugal la medalla de plata por equipos en la media maratón del Campeonato de Europa en ruta de veteranos. Y eso que apenas si tuvo tiempo de preparar la prueba a causa de una lesión que lo apartó de los entrenamientos durante cuatro largos meses. De ahí su alegría, pues apenas pudo preparar la carrera durante un mes. "Mi mayor medalla es saber que me recuperé", subraya. Este llanisco de El Cuetu Meré practicó antes fútbol, karate, natación... Hasta que un día, con 50 años a cuestas, por una apuesta, subió corriendo a La Tornería. Y se enganchó.

La primera prueba oficial que corrió fue la Ruta del Prerrománico, en Oviedo, en 2005, cuando muy poca gente en la comarca se dedicaba a trotar. Ahora ve "con satisfacción" la enorme cantidad de gente que corre, por las calles y en las pruebas. El caso es que desde aquella primera experiencia canguesa, hace 11 años, correr se ha convertido en su válvula de escape, en una suerte de realización personal: "compito solo contra mí mismo. Un día di el primer paso, y hasta hoy. Llegaré hasta donde pueda", añade.

Es un portento físico: tiene 38 pulsaciones por minuto y es capaz de correr un kilómetro en 4 minutos con 140 pulsaciones. Mide 1,70 metros, pesa 61 kilos cuando está en perfecto estado de forma y ha hecho la media maratón en 98 minutos y la maratón en 3 horas y 13 minutos, pese a que una "pájara" le afectó en los últimos kilómetros durante la prueba en la que consiguió esa marca, en el Campeonato del Mundo de Lyon, cuando también logró la plata por equipos y elduodécimo puesto en su categoría.

Empezó entrenando con el médico Raúl Mateos y desde hace cuatro años pertenece a la Sociedad Cultural y Deportiva (SCD) de Ribadesella, bajo la dirección del también médico Roberto Pire. Asegura que está "superagradecido" al club, al que dedica su medalla.

"Con mis años se da la paradoja de que cada vez voy más rápido", señala. Estos buenos resultados, aparte de por el entrenamiento, son "consecuencia" de sentirse "tan a gusto" en el club, que tilda de "modélico", y de la excelente relación, "tanto profesional como humana" existente en él.

Ha corrido tres maratones y no pudo acudir a una cuarta en Sevilla a causa de una lesión (fibrosis femoral). Tiene su casa llena de medallas y trofeos. Ahora su objetivo es correr en el otoño en Valencia, donde ya participó. Aunque no se marca metas, su "sueño" es correr el Campeonato del Mundo en Perth, en Australia. "El problema es económico, cuesta 3.000 o 4.000 euros", resalta.

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