Un verano tan bueno o mejor que el del año pasado. Los hoteleros y hosteleros del Oriente cruzan los dedos para que se cumplan las expectativas y el volumen de reservas crezca. De momento, la previsión es buena y en general los empresarios coinciden en que se nota la mejoría de un sector que enfila una de las mejores temporadas turísticas de los últimos años.
Así lo señala el presidente de la asociación de empresarios turísticos de Llanes y Ribadedeva "Fomento y Turismo" (Fomtur), Ángel Bada: "Esperamos que siga la tendencia positiva de los últimos años, pero sin llegar todavía a los números de antes de la crisis". La segunda quincena de julio y todo el mes de agosto será, un año más, el periodo de mayor ajetreo, siempre pendientes del tiempo. "Las altas temperaturas del centro de la Península nos pueden beneficiar a la hora de atraer a turistas. Ojalá tengamos buen tiempo y quienes vengan puedan disfrutar del mayor número posible de días de playa y de los paisajes que aquí tenemos". Bada lo tiene claro: "Las previsiones son buenas por el ritmo de reservas".
Javier Garaña, presidente de la Asociación de Restaurantes de Llanes, lo corrobora: "Probablemente será una buena temporada". La previsión de tiempo seco es para Garaña un punto a favor. "Hemos tenido ya un mes de junio donde se ha trabajado bien. Esperamos que toda la promoción que se hizo desde el Ayuntamiento y las asociaciones turísticas y empresariales en los últimos tiempos se vea reflejado en la afluencia de turistas, porque a priori, la tendencia, no solo se mantiene al alza en relación a otros años, sino que pica un poco hacia arriba", señaló.
En Ribadesella, Sabino Martínez, presidente de Aritur, la asociación que aglutina a los alojamientos, destaca que hay "muchas reservas y más tempranas que otros años". Así, el verano se presenta "bien, mejor que el del año pasado y el de 2015 ya fue bueno. Éste, un punto más". Martínez ve "mucho español y poco extranjero". Tan bien han ido las reservas que a estas alturas ya cuesta encontrar plazas libres en las casas y apartamentos rurales del concejo.
En la villa hay también buena previsión, tanto hotelera como hostelera. El restaurador Bruno Lombán destaca que "desde principio de año" se ha visto "un repunte, más gente". En general, señala Lombán, los visitantes tardaban "un poco más" en llegar a Ribadesella en el verano, pero el movimiento ya es palpable en toda la villa. En el albergue "Roberto Frasinelli", en la playa, están llenando las 50 plazas diariamente desde finales de mayo y su responsable, Jorge Núñez, resalta la importancia que tienen los peregrinos en el concejo, pues pernoctan "más de 200 todos los días".
En Colunga, según Faustino Pérez, presidente de Acotur, las expectativas no son malas y confían en que "siga así, que se cumplan las previsiones" de un verano que, por ahora, se espera "como el pasado, que por lo menos aquí fue muy bueno".
Interior
En el Suroriente, los empresarios de los Picos de Europa, Incatur, están muy contentos. Dice Toño Sánchez, su presidente, que será un verano "tan bueno o mejor como el del año pasado". En Cangas de Onís, donde cuentan con aproximadamente 4.600 plazas de alojamiento tienen ya el 70% reservado para agosto.
"Julio va tradicionalmente más despacio pero la ocupación será prácticamente plena al menos hasta la primera mitad de septiembre", vaticina Sánchez, que achaca los buenos resultados a tres factores principalmente: mejor situación económica nacional que anima a consumir, inseguridad en otros destinos turísticos como Túnez y Turquía y sobre todo una campaña de publicidad efectiva por parte del colectivo y las administraciones. Aún así advierte de que hay tareas pendientes por parte del Principado como mejorar las infraestructuras de acceso a los Lagos para que el visitante se lleve una buena imagen.
La satisfacción en la costa se repite en el interior. En otro de los municipios turísticos de Asturias por excelencia, Cabrales, tienen buenas expectativas. La edil de Turismo, Helena Martínez, confía en repetir los buenos datos de Semana Santa. Del 15 de julio a finales de agosto será el periodo de más afluencia: la última semana es la celebración del Certamen del Quesu de Cabrales.
Belisario Suárez, presidente de la asociación de Hostelería y Turismo de Parres (Hotupa), confía en colgar el cartel de completo durante todo el verano. "En julio, un mes que tradicionalmente era más flojo, hay un montón de eventos como El Carmen, el festival de música internacional Aquasella y El Bollu que junto con la amplia oferta de turismo activo del municipio animarán a la gente a venir y superaremos el 70% de ocupación", dijo.
En cuanto a agosto, confía en que eventos como el Descenso Internacional del Sella que se celebra el día 6, sirvan como reclamo. "Agosto siempre está lleno, hay días que bajan en canoa 3.000 personas", contó.
