Por unas horas Colombres, en Ribadedeva, se convirtió ayer en la capital comarcal de la solidaridad. Alrededor de quinientas personas llegadas desde todos los puntos del concejo, Peñamellera Alta y Baja, Llanes y el municipio cántabro de Val de San Vicente se dieron cita en el polideportivo de la capital ribadevense para participar en la décima segunda edición de la paella solidaria que organiza Cáritas Ribadedeva. La contribución de cada uno de los asistentes, pagando una entrada de ocho euros, resultará clave para contribuir a la mejora de las condiciones de vida en Bembereke, Benín.

Desde el mediodía, una legión de voluntarios comandados por el sacerdote de Ribadedeva, Amador Galán, y por el cocinero Saturno García Vila, popularmente conocido como "Turno", se pusieron manos a la obra para cocinar la paella.

"Estamos todos muy felices, un año más, por la gran acogida y colaboración de la gente. Con este tipo de iniciativas se crea un tejido social con el que tomamos conciencia de que podemos cambiar las cosas a mejor gracias a gestos como este", aseguró Galán mientras de la improvisada cocina instalada en el polideportivo salían los primeros platos de la paella. El dinero recaudado ayer se destinará de manera íntegra a un proyecto en Bembereke para la instalación en la escuela y el hospital de esta localidad de placas solares que permitan tener luz durante las veinticuatro horas del día en la escuela y en el hospital.

Finalizada la comida tuvo lugar un espectáculo musical en el que participaron diferentes conjuntos como el grupo de baile "Salsa Latina" de Ribadedeva, y el Grupo Folclórico de Suarías, dirigido por el gaitero Ricardo Soberado y el solista "Jesús y su Música". También hubo una rifa donde se sortearon varios objetos donados por comercios de toda la comarca.