Si alguien se merecía un premio a la constancia por la cantidad de horas dedicadas al deporte de la piragua, como simple aficionado -que no profesional o amateur compensado-, tratando de compaginar de la mejor manera posible su afición con su jornada laboral como oficial de mantenimiento y conductor dentro del plantel de funcionarios interinos del Ayuntamiento de Cangas de Onís, ese es Borja Iglesias Mosquera, quien hace escasas fechas logró una medalla de oro en el Europeo máster de maratón para veteranos. Todo un hito en su palmarés personal.
Aunque nació accidentalmente en Bilbao, donde sus padres residían en aquel momento, dado que el progenitor se dedicaba a prestar servicios en la construcción, en Lemóniz, lleva viviendo en la vieja capital del Reino de Asturias desde que contaba con apenas tres años. Borja Iglesias Mosquera, que cuenta en la actualidad 39 años, estudió en las Escuelas Públicas "Vázquez de Mella" y, posteriormente, en el Instituto Rey Pelayo. Además, cursó el ciclo formativo de FP de Agraria en el susodicho centro educativo cangués.
Hubo algún tiempo en el que aprovechó, en su época estudiantil, la temporada de verano para trabajar en alguna que otra empresa de turismo activo. Más adelante se inmiscuyó en el sector de la construcción, desempeñando tareas de peón para una firma que ejecutó la traída de aguas de Orandi al santuario mariano de Covadonga, así como también la senda peatonal que enlaza la zona de El Repelao con la parte alta del real sitio. Unos tres años y en diversos puntos de la región permaneció en ese gremio.
Hace tres lustros encontró tajo como monitor de jardinería del Ayuntamiento de Cangas de Onís, en un principio con contratos eventuales, teniendo a su disposición a tres personas -"Toñito, el de Contranquil", "Conchi, la de La Plaza" y "Guadalupe, la de Les Roces"- para encargarse del mantenimiento de las zonas verdes, tanto en la propia urbe canguesa como en otros lugares del concejo. Con el transcurso del tiempo salió una plaza de oficial de mantenimiento y conductor, la cual logró, en la que lleva nueve años.
Desde finales del pasado ejercicio Borja Iglesias está al frente del mantenimiento de los jardines de la ciudad. Este pasado viernes, en el parque municipal Casa Riera, estrenó la moderna y flamante máquina cortacésped que apenas unas horas había adquirido el Ayuntamiento de Cangas de Onís, previo visto bueno del regidor José Manuel González Castro, quien probó su conducción y manejo en la improvisada presentación de la misma en la plaza Camila Beceña. "También me tocó estrenar la anterior años atrás", recuerda con una sonrisa ese funcionario interino, al que le apasiona el mundo de la piragua.
Tenía 12 años cuando empezó en el piragüismo en el Sirio, de la mano de "Ramonín, el de La Llongar". Cuatro años más adelante hubo de parar, a causa de una lesión en los brazos. Atrás quedaban numerosos éxitos en categorías menores; la concentración nacional para infantiles, en la que coincidió con Alberto Llera y Walter Bouzán, entre otros; o el Descenso del Sella que ganó en cadetes, con Óscar Casero. Cambió la pala y la piragua por el balón: jugó tres temporadas en el Cánicas AC, tanto en juveniles -teniendo de entrenador a "Luisma, el Lecheru"- como en Primera Regional -con Pichi Alonso de técnico-.
Corría 1997, ya con 20 años de edad, cuando Borja regresa al deporte de la piragua, nuevamente al Club Sirio. Permaneció hasta el 2003, cosechando muy buenos resultados, sobremanera en la K-4 que se codeó a nivel nacional e internacional con lo mejorcito del momento, cuya hito fue la Regata "Príncipe de Asturias", en aguas gallegas, imponiéndose a selecciones nacionales. Formaban un sexteto de auténtico lujo: los hermanos Martínez del Cueto, Orlando Poo, Kiko Vega, Óscar Casero y él. Todos ellos dieron días de gloria al histórico club de piragüismo de Cangas de Onís.
Allá por el 2004 Borja Iglesias decidió cambiar de aires y fichó por Los Rápidos, de Arriondas. Formó tándem con "Chon" Rodrigo Llamedo, alcanzando un séptimo puesto en el Descenso del Sella. Cada vez más integrado, se decantó por echarle una mano a Alberto Gutiérrez Cuadriello -director técnico del club y presidente- en las tareas de iniciación con los más pequeños. Ahora, poco a poco recoge algunos de sus frutos, como es el caso de Pedro Vázquez Llenín, campeón del Mundo y de Europa Júnior, en K-4 1.000 metros, con quien paleó en barco de equipo las dos últimas ediciones selleras: décimos en 2015 y undécimos en 2014. Y, si nada se tuerce, el primer fin de semana de agosto volverán a intentarlo, con el objetivo de mejorar esa clasificación.
El horario laboral de Borja en el Ayuntamiento de Cangas de Onís es de 7.45 a 15.15 horas (invierno). Y tras el almuerzo, toma el petate para acercarse a la ría de Ribadesella para entrenar, pues simultanea las categorías inferiores de Los Rápidos con sus entrenamientos personales. Fruto de ello fue la medalla de oro que conquistó hace apenas diez días en el Europeo máster de maratón para veteranos, con los colores de la selección española, junto al maliayés Pablo Muñiz Cantora, "el Pasteleru". Pidió permiso para acudir a la cita continental y se lo concedieron: el primer día fue cuarto en K-1; y el segundo, acabó en lo más alto del podio, en K-2.
Casado desde 2006 con Montse González Alonso, ésta de Arriondas (Parres), tienen un niño de 8 años, Sergio, que se siente atraído por la pesca, tanto fluvial como marítima. De momento Borja Iglesias Mosquera no piensa colgar la pala y la kayak, sino todo lo contrario, ya que ha sabido compaginar deporte y trabajo, junto a la familia. Por todo eso apenas se le conocen otras aficiones. Eso sí, no olvida los inicios de su etapa alevín como jugador de pelota vasca en "El Frontón", en La Jira, a las órdenes del pelotari riojano Heliodoro Moreno, con compañeros de la talla de Borjita y Rubén, tantos otros guajes.
