El secreto para hace la mejor sidra está en mayar la manzana nada más cogerla del manzano, con limpieza y esmero. Al menos eso asegura Félix Ormeño, que ayer se impuso en el concurso de sidra casera de Piloña que por segundo año se celebró en Infiesto. En el evento, organizado por la Asociación de Sidra Casera de Piloña, participaron medio centenar de llagareros locales, pero fue la de este vecino de Vallobal la que más convenció al jurado profesional.

"No pensaba presentarme, pero todos mis amigos me decían que era muy buena y al final me acabó convenciendo mi mujer, Mª Concepción Díaz", aseguró este minero jubilado tras recoger el premio. A las puertas de la victoria se quedó el ganador del año pasado, Saúl Fresno, residente en Miyares. El tercer puesto fue para Jesús Fraile, de Anayo. Los tres primeros clasificados tendrán la oportunidad de participar en el concurso regional.

Como novedad, los asistentes que compraron el vaso conmemorativo del concurso pudieron participar en una cata popular que consagró a la sidra de Roberto Redondo, de Coya, como la favorita del público. "El reconocimiento supone un aliciente para seguir mayando", contó este pintor jubilado, que lamentó que la manzana viniera este año "algo dañada por falta de agua y exceso de sol".

El evento contó con un pregonero de excepción: el vecino Manolo Marina, del grupo de teatro Ensin Reparu, que tuvo un recuerdo para todos los lagareros del concejo. El niño Dani Fuentes escanció a mediodía el primer culín de la jornada, que finalizó al filo de las cuatro de la tarde con varios asistentes entonando el himno a la patrona de los mineros al son de la gaita.

En total se escanciaron en Piloña unos 1.400 litros de sidra, o lo que es lo mismo: se degustaron unos 7.000 culinos de la bebida tradicional asturiana, según explicó el vicepresidente de la Asociación de Sidra Casera de Piloña, Avelino Fuentes. "El balance es más que positivo. La respuesta tanto por parte de los lagareros como del público ha sido excelente. La calidad de la sidra es notablemente mejor que en la primera edición", aseguró. Su afirmación la compartían concurrentes como Antonio Escobio. "Cada año se superan, da gusto que se organicen cosas así", concluyó.