El primer estudio que proyectó el aparcamiento planteó que el edificio disponga de control de accesos para vehículos y "conexión peatonal directa con los andenes de la estación de autobuses, previéndose la posibilidad de habilitar conexiones peatonales con el centro de salud y también con la calle Palacio Valdés". El equipamiento se plantea, además, "totalmente accesible para personas con movilidad reducida", para lo que se prevén "dos núcleos de comunicación vertical, uno de ellos dotado de ascensor, adosado al actual edificio de la estación de autobuses". Se reservan, además, un total de ocho plazas para personas con movilidad reducida. En cuanto a la dotación de aseos, el estudio consideraba suficiente la existente en la estación de autobuses. Por otra parte, la cimentación del edificio se plantea a base de micropilotes empotrados de entre 15 y 16 metros de longitud.