El plan de acceso limitado a los Lagos de Covadonga tendrá un calendario más amplio y será más exigente con los vehículos, tanto para los autobuses como para los coches. Así lo anunciaron ayer la consejera de Infraestructuras, la socialista Belén Fernández, y el alcalde de Cangas, el popular José Manuel González Castro, tras la reunión que mantuvieron para consensuar "mejoras" en un dispositivo que ninguna de las partes cuestiona.

Las administraciones también pondrán de su parte para mejorar la experiencia del visitante a los Lagos con la inversión de más de 900.000 euros en una "reforma integral" que se ejecutará a lo largo del próximo año y que renovará el firme entre la rotonda de Covadonga y Buferrera. No se actuará en todo el vial, dado que algunos tramos ya se mejoraron el año pasado, pero el Principado espera que la obra "garantice un firme en buen estado durante varios años". Pese a que no se habló de plazos, la consejera confía en la reparación de los "cuatro hundimientos" antes del verano y, si para entonces no se ha concluido la obra, compaginar los tajos con el plan de transporte.

En cuanto al calendario en el que se limitará el acceso de vehículos privados para que los visitantes suban en autobús, en 2017 será "más amplio y con vocación de estabilidad", una decisión tomada tras "constatar la buena acogida y que hay determinadas fechas en las que se necesita", apuntó Fernández después de que el regidor cangués también asegurase que "nadie duda de que es necesario, y cada vez más".

Los políticos apoyaron esta opinión en las cifras de este año: en lo que va de año han utilizado el plan 149.034 personas, y sólo en los meses de verano fueron 131.633. Estas cantidades suponen un incremento del 18 por ciento este verano respecto al anterior y del 8 por ciento de lo que va de 2016 respecto a todo el año 2015.

Fernández avanzó que el dispositivo se activará durante los puentes del Primero de Mayo, el Pilar y la Constitución; en Semana Santa se pondrá en marcha el sábado antes de Ramos hasta el domingo de Pascua y en verano será diario desde el 1 de julio al 15 de septiembre. Durante estos periodos, los visitantes que quieran subir a los Lagos de Covadonga en su vehículo tendrán que hacerlo antes de las 8.30 horas y, si bien hasta ahora podían bajar a la hora que quisieran, las nuevas limitaciones les obligarán a hacerlo entre las 13 y las 13.30 horas o entre las 15.30 y las 17 horas. Esta medida pretende, indicó Fernández, evitar los monumentales atascos que se han formado este año en los días en que el plan de transporte no estaba activo pero la afluencia a los Lagos era masiva.

Al restringir la bajada se evitarán, añadió Fernández, los "constantes goteos de cruces entre coches y autobuses", lo que a su juicio somete a la carretera a una presión perjudicial y pone en peligro la seguridad vial. Los conductores particulares tendrán que atenerse a esos horarios de bajada, pero los de autobuses, con mayor conocimiento, podrán evitar los cruces en lugares en los que exista riesgo.

Certificación energética

Los turismos tienen nuevas restricciones, pero los autobuses también. El Principado exigirá a todos los que quieran acceder a los Lagos que cuenten con la certificación energética "Euro 6", "Euro 5" o "Euro 4", como mínimo. Este requisito tendrá que cumplirlo no sólo la flota de quien resulte adjudicatario del servicio, sino cualquier autobús contratado por una excursión para disfrutar de una de las vistas más anheladas de la región. Belén Fernández explicó que, de los cuarenta autobuses que estarán ahora realizando el servicio, un "mínimo porcentaje" cumplía este requisito.

La mejora de la información que se facilita a los visitantes y usuarios del plan de transporte es otra de las novedades anunciadas por las administraciones regional y local. La Consejera reconoció "ciertos déficit informativos", lo que tratarán de paliar "reforzando los recursos con guías o folletos", una idea que tienen que "madurar para poner en marcha en 2017" y que servirá, además, para ensalzar "los valores culturales, ambientales y gastronómicos".

En cuanto a la obra proyectada para la carretera de los Lagos, la CO-4, el proyecto pasa en la actualidad por la pertinente tramitación ambiental, necesaria para culminar el proyecto definitivo. Una intervención que está ya licitada en 290.000 euros y "a punto de adjudicarse", según anunció Belén Fernández, es la de la carretera de Perlleces, que presenta numerosos baches y deficiencias en el pavimento.