La ayuda de alimentos que reparte la asamblea de Cruz Roja en Ribadesella se ha reducido en los últimos cuatro años casi a la mitad. De las 62 familias que la necesitaban en marzo de 2012 se ha pasado a las 34 que lo han recibido esta semana, según explicó el presidente de la asamblea, Jesús Amas Valdés. En total son 84 las personas que han recibido estos lotes de alimentos procedentes de los excedentes de la Unión Europea. En realidad hay más riosellanos que necesitan ayuda, pero los requisitos europeos son bastante rígidos y obligan a la organización a realizar un listado a principios de año con quienes los cumplen todos. Si alguien precisa alimentos a lo largo del año no se le niegan, pues Cruz Roja reparte de las donaciones particulares que llegan y del Banco de Alimentos.

Las cifras reflejan buenas noticias, pero hay que tener en cuenta que con el frío ha llegado también la temporada baja y el momento en que muchos contratos temporales o por desempleo se han acabado. Por eso la asamblea riosellana, con un "presupuesto bastante ajustado", sigue agradeciendo donativos de todo tipo, tanto en alimentos como en metálico, un dinero que reparte en función de las necesidades de cada momento.