Las autoridades del parque nacional pretenden recuperar el lago de Ándara, en Cantabria, desaparecido hace un siglo, el año que viene. Los informes pendientes para valorar las posibles afecciones al régimen hidrológico y la movilización de metales pesados consecuencia de la restauración ya están encima de la mesa, por lo que en breve se solicitará a la Dirección General de Medio Ambiente de Cantabria que valore la necesidad de someter el proyecto a evaluación ambiental y, en su caso, impulsar el proyecto a lo largo del año 2017.