Un presupuesto "equilibrado y muy prudente" de 4.860.935,18 euros. Así define el equipo de gobierno socialista de Piloña -con mayoría absoluta- las cuentas para 2017 que aprobará mañana (pues cuenta con mayoría absoluta en la Corporación) durante el pleno extraordinario que se celebra a las 13.00 horas en Infiesto. La cifra supone un incremento del 0,26 por ciento respecto al documento del año pasado, de 4.848.291,93 euros. El presupuesto busca por un lado fomentar el desarrollo rural y por otro reducir la deuda municipal, que en la actualidad asciende a los 2.510.459,81 euros y que a finales de 2017 descendería a los 1.995.659,97 euros. En lo que va de legislatura ya se redujo la deuda en 1.036.255,31 euros, según explicó la concejala de Hacienda, Patricia Ferrero.

En el capítulo de gastos en bienes y servicios una de las novedades será la partida de 22.000 euros para poner en marcha un servicio de comida a domicilio que beneficiaría a una veintena de usuarios; y los 23.000 euros destinados a la mejora de las fachadas de los colegios públicos de Villamayor y Sevares. Además, se duplica el presupuesto en actividades culturales y deportivas, que pasa de 15.000 a 30.000 euros. También aumenta la partida de festejos populares (90.000 euros), la de desbroces de montes (de 25.000 a 35.000 euros) y se reservan 100.000 euros para el mantenimiento de vías públicas.

En el capítulo de gastos por transferencias corrientes, que ascienden a los 379.604 euros, se crecen las ayudas económicas de emergencia de los 7.000 a los 30.000 euros y se dota una partida de 6.000 euros de subvención al fomento de emprendedores, cuyas bases se están ultimando.

Las inversiones ascienden en 2017 a 252.132,89 euros, siendo la mayor partida de 188.832,89 destinada a la mejora de espacios públicos por determinar.

Se aumenta asimismo la dotación al Plan Estratégico del Comercio y el Turismo (de 10.000 a 15.000 euros) y se renuevan los 7.000 euros para la campaña de investigación del yacimiento de Argandenes.

En cuanto a ingresos, el alcalde afirmó que no crecen a pesar de la mejora económica por los ajustes a la baja en la revalorización del IBI y se comprometió a congelación de tasas en 2017.