Temerosos de que el invierno deje el puerto de Llanes impracticable por la falta de dragado. Así están, a día de hoy, los pescadores de la cofradía de Pescadores Santa Ana de Llanes. La campaña anual de dragado llevada a cabo en la infraestructura portuaria llanisca por la consejería de Fomento el pasado verano con la draga Nalona, no incluyó la limpieza del muelle al presentar los bajos fondos supuestos niveles de contaminación.

Según los marineros desde la consejería les aseguraron que el dragado iba a tener lugar en noviembre, una vez se comprobó que los niveles de contaminación en el puerto no eran tan preocupantes como se había pensado en un primer momento. Más de dos meses después y con los primeros temporales invernales encima, los marineros llaniscos muestran su preocupación.

"Nos sentimos inseguros y engañados. El puerto está que da pena y abandonado. Desde la conserjería nos dijeron que dragarían la dársena en cuanto tuviesen el permiso de Medio Ambiente pero han pasado dos meses y nada. Este problema de dragado solo lo tenemos aquí", aseguró el patrón mayor de la cofradía de pescadores de la villa, Ángel Batalla.

Éste sostiene que los barcos están rodeados de arena, acumulándose en algunas partes del embarcadero más de tres metros de sedimentos que dificultan la entrada y salida al mar de los mismos. "Estamos rodeados de arena y mucho peor que hace cuarenta años. Nos sentimos abandonados. En mareas de coeficiente cien los barcos de mayor calado nos quedaremos varados", dijo.

Al mal estar de los profesionales de la mar llaniscos por la falta de dragado hay que sumar su desacuerdo con Puertos por denegarles este organismo el permiso para meter los barcos en el interior del puerto deportivo durante el temporal anunciado para estos días.