A Igor Paskual no se le daba bien el fútbol de pequeño, así que dedicó todas sus energías a aprender a tocar la guitarra. El músico, que en la actualidad forma parte de la banda de Loquillo, participó ayer en las jornadas culturales del Instituto de Arriondas, donde acabó con algunos de los mitos que rodean a las estrellas del rock. "Hay que trabajar mucho para sacar adelante una canción, no todo es fiesta y desenfreno", aclaró el compositor, que se considera un asturiano nacido en San Sebastián. "La gente piensa que somos ricos, pero no es así. La entrada que pagáis cuando venís a los conciertos sirve para renovar los equipos, pagar al que pega los carteles y al que monta el escenario", dijo.

Paskual mostró a los chavales, a través de fotografías personales, todo el proceso al que se enfrenta un artista desde que compone una letra hasta que ésta llega al público: los ensayos, la promoción en los medios, el diseño de las carátulas, la grabación de videoclips... "No hay un camino exacto para vivir de la música. Nadie tiene la fórmula para conocer cómo llega una canción a la gente, más allá de que sea pegadiza y se estrene en el momento exacto", valoró el guitarrista, que estudió Historia del Arte en la Universidad de Oviedo, donde recientemente coordinó un curso sobre la trascendencia de la figura de David Bowie.

Paskual, que finalizó su coloquio en el instituto con un animado concierto, hizo hincapié en la importancia de la figura del telonero. "Hay que apoyar a los que empiezan, y transmitir el saber y la experiencia a los que vienen detrás", contó.

A la intervención del guitarrista de Loquillo se sumaron ayer otras iniciativas, como un taller de emprendedores, en el que participaron los chef con estrella Michelin Nacho Manzano y José Antonio Campo Viejo; el promotor de la Escuela Asturiana de Piragüismo, Calo Soto; el panadero artesano José Luis Cándido, y el elaborador de queso gamonéu José Luis Alonso. Por su parte, la exalumna del centro y codirectora de la película "Leyuad", Inés González, ofreció un taller de animación con luz.

Las jornadas culturales concluyen hoy con visitas a un hotel ecológico de la zona, un torneo de ajedrez, y actividades como baile estonio y cocina moderna.