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Andrés Suero, todoterreno del fútbol

Entrena a los alevines del Urraca CF y a dos grupos de la Escuela Municipal de Posada y es capitán del equipo de Tercera División

Andrés Suero. J. M. CARBAJAL

Vigésimo sexta jornada del campeonato liguero del grupo IV de la segunda división alevín fútbol-8. Campo sintético de La Corredoria, en Posada (Llanes). Jugaban el equipo local, el Urraca Club de Fútbol, y el Caudal Deportivo. Corría el minuto 14 cuando cae lesionado un niño del conjunto visitante con el marcador reflejando tablas (1-1). Los de Mieres no disponían de reservas, pues, por diversas causas, acudieron en cuadro -ocho efectivos justos-. Visto esto, el entrenador anfitrión, Andrés Suero, decide retirar a uno de sus chavales para no jugar en superioridad numérica. Al final, el Urraca CF venció por 6 goles a 1, llevándose el elogio y reconocimiento del equipo rival por tan singular gesto deportivo.

Andrés Suero Aller, de 31 años de edad, natural de Sotu Cangues (Cangas de Onís), fue el artífice del detalle de deportividad que causó admiración en el fútbol-base asturiano hace escasas fechas, el 25 de marzo. Entrena al plantel alevín del Urraca CF en la presente temporada, tras haber dirigido en anteriores campañas al infantil, juvenil, cadete y benjamín de la citada entidad.

Asimismo se encarga de sendos grupos -una veintena de niños y niñas de 4 y 5 años de edad- de la Escuela Municipal de Fútbol de Posada. Y, por si fuera poco bagaje, juega en el equipo de Tercera División del Urraca CF, del que es capitán.

Profesionalmente se dedica, como autónomo, a la producción de frutos rojos -fresas y arándanos- en una finca familiar, conocida como "La Joz", que posee en Sotu Cangues. Empezó con esta actividad en el año 2014, sobre un terreno de una hectárea de superficie. Cuenta con 3.000 plantas de arándanos y otras tantas de fresas. Produce una tonelada de cada una de esas variedades y van destinadas al mercado locales, es decir, Cangas de Onís y alrededores. La iniciativa laboral que emprendió en su momento va dando, poco a poco, los resultados apetecidos, ofreciendo sobremanera calidad.

Estudió la Primaria en la Escuela Pública Vázquez de Mella y también en el Colegio Público Reconquista. Posteriormente, los continuó en el Instituto Rey Pelayo, todos ellos en la capital del concejo cangués. Sin embargo, desde pequeño, su verdadera pasión es el mundillo del balompié. Probó en el karate -a las órdenes de Toño González-, en el piragüismo -no llegó a debutar en competición oficial- e incluso en el bádminton, pero ninguna de esas disciplinas le convenció. Ostenta el título de técnico deportivo, especializado en fútbol, lo que le permite dirigir equipos hasta de categoría regional, aunque aguarda a que salga la convocatoria para intentar escalar el siguiente peldaño en su formación deportiva: título de entrenador de nivel 3; esto es, de ámbito nacional.

Allá por el año 1990 empezó a darle sus primeras patadas al balón en las filas de la Escuela Municipal del Cánicas Atlético Club, fundada por Ramón Hevia Castaño y que tenía de monitores, entre otros, a Minico Foyo Berdayes, una de las leyendas de la famosa "ruta del oro". Andrés Suero jugó en el cadete del Arenas del Sella, de Arriondas, y en el juvenil del Club Deportivo Llanes, aunque después retornó al Cánicas AC para formar parte del conjunto regional, con Pezón de entrenador.

Con 19 años se hizo cargo del infantil del Cánicas AC, estando de presidente del club (temporada 2004/05) de Cangas de Onís Constantino Pérez Mauricio, "Tino, el de la Imprenta". A la siguiente campaña le fichó el Urraca CF, entonces en Primera Regional, simultaneando esa labor de jugador con la de técnico del cadete del Cánicas.

Actualmente, Suero lleva once temporadas en el club de la villa de Parres Pinera, como jugador, las cinco últimas en Tercera División y compartiendo la capitanía del primer equipo. También hubo unos años en los que dirigió al cadete del CD Llanes -tanto en primera como en segunda categoría-, así como a la Escuela Deportiva Municipal de Futbol de Llanes. Mientras, en las campañas veraniegas, tuvo vinculación con el Campus del Real Oviedo, durante ocho veranos, en El Requexón; con el Campus Gerardo Noriega, en Posada, otros dos veranos; y con el Campus del Urraca CF, el pasado verano, en su primera edición.

Por otro lado, Suero colaboró en calidad de técnico ayudante con Luis Arturo Ruiz-Capillas (actualmente en el filial del Real Oviedo, que milita en la Tercera División) en la preparación de los combinados de la comarca del Oriente sub-16, sub-18 y sub-12, en sus enfrentamientos de carácter amistoso con las selecciones autonómicas del Principado de Asturias centradas en la puesta a punto de las diferentes fases de los Campeonatos de España por selecciones territoriales. Pese a esa amplia experiencia, Andrés Suero, se vio un tanto sorprendido por la repercusión que tuvo su gesto deportivo en el partido contra el Caudal de alevines.

"Si me pasa a mí -quedarse en inferioridad numérica por lesión y carecer de suplentes-, me gustaría que también me lo hicieran", comentó el joven técnico del club de La Corredoria, que preside Juanjo González. Parece que en esta ocasión el fútbol-base no acaparó el interés mediático por una retahíla de mamporrazos entre padres en un estadio para vergüenza de sus propios retoños o mozalbetes. Hacen faltan gestos deportivos como el protagonizado por Andrés Suero: "al final, haces lo que le venga bien a los críos, con independencia del resultado. Ese gesto, sin duda, lo volvería a repetir", sentencia.

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