El grupo folclórico "Trasgu" de Oviedo cumplió ayer treinta años de ofrenda a la Santina, una cita con la que cumplen anualmente en el santuario de Covadonga. Fueron unas 85 las personas que visitaron a la Santina en la Cueva, entre los que había integrantes de la formación ovetense pero también de las leonesas "Calecho" y "Tresvalles". La Banda de Gaites de Cangas de Onís puso la nota musical a una jornada soleada y, sobre todo, emotiva.

Así lo demostró Cuqui Ormazábal, quien no pudo contener la emoción al leer el texto de la ofrenda. Con 76 años es la integrante más veterana del grupo y le sigue su hija, Tote González, la presidenta. Fueron los más jóvenes, el relevo, los encargados de presentar a la Santina el centro especial por el trigésimo aniversario de la ofrenda, bailarines entre los dos y los diez años. Por esta ofrenda pasaron grupos de toda España (Murcia, Albacete y Galicia, entre otras comunidades) y estos últimos años se han mantenido fieles los leoneses, pues "cuesta dinero y las ayudas no son muchas", lamentó Ormazábal antes de agradecer la colaboración del Ayuntamiento de Parres, donde los grupos ofrecieron una actuación a la hora del vermú, tras la ofrenda, la misa en la cueva (oficiada por el abad, Juan José Tuñón) y los bailes que realizaron donde el pozón. Los de Oviedo bailaron la Jota la Llana (pieza fija en los 30 años), y Los Siete Taconeos, un baile de la zona de Aller.