Mantener con vida a personas que han sufrido una parada cardiorespiratoria hasta que llegue la ayuda médica especializada. Eso es lo que aprendieron a hacer los alumnos de 4.º, 5.º y 6.º curso del colegio público de Infiesto que ayer participaron en un taller de reanimación cardiopulmonar impartido por el servicio de pediatría del centro de salud de Infiesto.

Los profesores, con la directora Laura Fresno a la cabeza, también practicaron el "boca a boca" con el maniquí y la experiencia fue tan positiva que para el próximo año planean ampliar el curso para que incluya primeros auxilios en pequeñas contusiones y golpes. El taller de reanimación cardiopulmonar se desarrolló en los antiguos laboratorios del colegio de Infiesto, donde la directiva está habilitando un salón de actos. Para completar la reforma sólo resta que la Consejería de Educación financie la grada, el telón, los bancos y el tabique de separación móvil del escenario.