María del Pilar González Bulnes es la presidenta de la Asociación de Peregrinos de los Caminos del Norte (APECAN), cuyo ámbito de actuación son los veintidós kilómetros de Ruta Jacobea que hay entre Ribadesella y Caravia. El colectivo acaba de nacer (fruto de una escisión de "Amigos de Ribadesella", que ha integrado el Camino en una de sus secciones desde 20014) y le acompañan Alejandro Barrero como secretario, María Victoria Álvarez como tesorera y los vocales Javier Arias y Manuel Quesada.
- ¿Continuarán con los mismos objetivos por los que trabaron dentro de "Amigos de Ribadesella" o se han marcado alguno nuevo?
-Llevamos desde 2004 trabajando en el Camino de Santiago y pensamos que teníamos la experiencia y el conocimiento para seguir. Por eso decidimos que era bueno seguir e hicimos la asociación. Nuestro Camino, el de Ribadesella, termina en Caravia, donde continúan cinco kilómetros más. A lo largo de estos años nos hemos dado cuenta de que existía un cierto vacío y nos pusimos en contacto con la alcaldesa, Salomé Samartino. Estuvo de acuerdo e incluimos en la asociación el tramo de Caravia, que es un trazado que va por la costa. La Ruta Jacobea tiene encanto de por sí, pero cuando va por la costa parece más atrayente.
- ¿Se plantean incluir a Colunga en su ámbito de actuación?
-No, porque creo que sería mucho. Sería estupendo incluir Colunga y no se descarta nada, pero de momento no nos planteamos más que Caravia. Quizás aparezca alguien de la zona que tome la iniciativa al vernos a nosotros, pueden salir otras iniciativas muy válidas, pues a veces sólo es falta de información. Hemos presentado la asociación en Ribadesella y más adelante lo haremos en Caravia para darnos a conocer y que nos pongan cara.
- ¿Pretenden captar socios?
-Sí, estamos en esa fase. No pretendemos ser una grandísima asociación, sino tener el número suficiente para llevar a cabo la actividad que queremos en el Camino. Para cubrir gastos, no más. Queremos hacer actividades, pero hemos decidido no avanzar mucho y dentro de un tiempo, en función del respaldo que tengamos, planificar más en concreto.
- Dado que la sección del Camino de "Amigos de Ribadesella" estará operativa en tanto que la asamblea de socios no decida lo contrario... ¿podrían darse duplicidades con APECAN?
-A lo único que nos vamos a dedicar es a empezar a trabajar con nuestra asociación. En principio no nos lo hemos planteado, si quiera. De lo que vayan a hacer los demás no tenemos ni idea.
- ¿Continuarán con proyectos como el de dar sombra al Camino con la plantación de árboles que protejan al peregrino del sol?
-Este proyecto está, en principio, parado por problemas que desconocemos y que son ajenos a nosotros. Su puesta en marcha ya no está en nuestras manos.
- ¿Cuáles son, a su juicio, las prioridades que se debe marcar el Camino de Santiago a su paso por Ribadesella y Caravia?
-Nuestros ámbitos de actuación son los alojamientos para peregrinos, la conservación del Camino y la relación con ayuntamientos y con cualquier otro estamento oficial. En cuanto a la conservación, los famosos charcos de Cuerres, en Ribadesella, se pusieron en conocimiento del Ayuntamiento y lo van a subsanar. En lo relativo a los alojamientos, cada uno hace el Camino como quiere y no todo el mundo va al albergue de San Esteban de Leces, hay gente que solicita alojamientos también en el pueblo. Algunos hosteleros se están poniendo en contacto con nosotros para explicarnos qué tipo de alojamientos tienen, ya que en poco tiempo tendremos la página web y quieren que los incluyamos. También estamos yendo a las asambleas de la agrupación de asociaciones. En la próxima se abordará la reglamentación de los albergues, porque comunidades vecinas como el País Vasco, Galicia y Cantabria las tienen y nosotros todavía no.
- Quienes llevan los albergues, los hospitaleros, son voluntarios, pero cada vez hay más establecimientos que quieren alojar a peregrinos, ¿será necesaria una profesionalización de estos segundos?
-Este tema se estuvo hablando en una de las últimas reuniones y se comentó la posibilidad de que una entidad como al Cámara de Comercio formase a los responsables de estos alojamientos privados, negocios de hotelería que sean también de peregrinos. Claro que es importante, es una ventaja. Como el Camino lleva un auge tremendo y están surgiendo multitud de alojamientos privados sería positivo tener una formación para ir todos más o menos en la misma dirección.
- ¿Cuál es el detalle de esta evolución de los peregrinos que pernoctan en Ribadesella?
-Hay un ascenso tremendo en el número de peregrinos que pernoctan en el albergue de San Esteban de Leces, en Ribadesella. Si miramos cifras de hace una década, por ejemplo, vemos cómo ha subido un cincuenta por ciento, desde los 1.487 que pasaron en el año 2007 hasta los 2.985 con los que se cerró el año pasado. Es cierto que en aquel momento el albergue contaba con 24 plazas, 14 menos de las actuales. Pero con este número de plazas el incremento también es espectacular. Desde 2010, por ejemplo, el aumento ha sido del 33 por ciento y en los últimos tres años del 24 por ciento. Hay otro factor importante, la desestacionalización: antes era julio, agosto y parte de septiembre. Ahora los hay hasta en enero, pasan todo el año, y a partir de marzo ya empieza a haber cantidad de gente.
