La "guerra" abierta entre marineros y recolectores de arribazón se recrudece y vive momentos de máxima tensión. La paralización cautelar por orden judicial de la campaña de arranque de ocle en el mar, que iba a comenzar el próximo lunes, tras recurrir la Asociación de Vecinos y Amigos de Llanes (AVALL) la resolución del Principado que la autorizaba, ha caído como una bomba entre la marinería. "Nos hemos metido todos en un berenjenal y no sabemos como vamos a salir de esta", señaló ayer el presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Asturias, Dimas García.

El representante de los marineros asturianos asegura que se ha abierto una puerta que será "muy difícil cerrar", en lo que se refiera a la convivencia entre ambos sectores. Anuncian los marineros que pedirán daños y perjuicios si la campaña no comienza el lunes, tal y como estaba previsto, y que solicitarán también a las autoridades que vigilen el "estricto cumplimiento" de la normativa que regula la recogida de algas de arribazón en los arenales.

Señala García que ellos no van a denunciar a nadie, pero exigirán que se cumpla "al cien por ciento la normativa que regula el arribazón, lo que significará que lo van a tener difícil como nosotros ahora. Van a pagar justos por pecadores, pero es lo que pasa cuando comienza una guerra. Nosotros queremos que se cumpla la ley en cuento al arribazón. Nada más que eso", señaló García. ¿Que significan esas palabras? Pues que podrían prohibirse las rastrillas que se enganchan a los tractores para recoger el ocle (una práctica que no está contemplada en ninguna modalidad de recogida de algas de arribazón), e incluso la entrada de vehículos al agua.

"No entendemos la postura del juez, ni que lo ocurrido afecte a toda Asturias. Que afecte a Llanes como zona experimental no lo llegamos a entender, pero podría ser. Ha comenzado una guerra si cada vez que exista un problema vamos a terminar en el Juzgado. No sé lo que va a pasar", manifestó García. Los marineros confían en que antes del lunes se les dé una solución satisfactoria, que pasaría por la revocación de la suspensión cautelar del permiso para arrancar ocle en los fondos marinos de Asturias.

El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores Santa Ana de Llanes, Ángel Batalla, cree que los argumentos que dio AVALL al solicitar la paralización del arranque no tienen peso suficiente. "Esperamos que, con las alegaciones que ha enviado el Principado, se levante la prohibición de arrancar", señaló Batalla.

"No creo que el juez permita arrancar en el resto de Asturias y lo impida aquí, pues se trata de una única resolución. Sería un desprecio para los pescadores del Oriente. En el centro de Asturias llevan arrancando ocle desde hace sesenta años y sigue saliendo", subrayó. Batalla cree que no hay que meter "en el mismo saco" a todos los profesionales del arribazón. "Es una pena, pues todos podíamos estar conviviendo como vecinos que somos. Seguramente esto acabará con la prohibición de que metan los tractores en la playa", indicó.

"Hacen arribazón y también extracción. Cuando se meten al agua con el tractor hacen arrastre, y está prohibido en aguas interiores. Es curioso que se den banderas azules a playas como la de Barru, donde se hundió un tractor este invierno recogiendo ocle y se derramó aceite y gasoil", añadió.