No hay mozas como las de Nueva. Eso dice la canción de la danza de San Juanón, a la que unas sesenta personas dieron vida ayer en la localidad llanisca, ante la atenta mirada de multitud de vecinos y visitantes. Las parejas danzaron una vez concluida la procesión: comenzaron en el interior de la iglesia y salieron hacia el puente, terminando en la plaza Laverde Ruiz con "vivas" a San Juan y a Nueva.

La fuerza vocal de algunos de los danzarines fue todo un espectáculo, una tradición que se mantiene viva gracias a grandes y pequeños. Hubo un tiempo en que había danza grande y pequeña (de adultos y niños), pero ahora se han fusionado: los primeros la encabezan y los segundos la concluyen.

Sí cambió, pero hace casi cien años, la fecha y el nombre de la fiesta, pues antes de los años veinte era San Juan y se celebraba el 24 de junio, como la mayoría. Sin embargo, un problema con el cura de entonces llevó a un grupo de vecinos a fijarla en el último domingo de julio y a llamarla San Juanón. Y así se ha quedado, como rememora Adolfo Jorge Sánchez, más conocido como "Fito el de la catedral", cuyo tío abuelo, Gregorio del Campo, estaba entre los promotores de aquel cambio. Hoy "Fito" pertenece a la comisión organizadora junto a Pepe Juanes, "Chache" y María Jesús Iglesias, quienes defendieron la autenticidad de su danza. Antes, la procesión contó con la Banda de Gaitas Ciudad de Cangas de Onís y con un grupo de mariachis. Por la noche hubo verbena con las orquestas "Stereo" y "Banda Norte" y San Juanón concluirá hoy con la jira a Cuevas del Mar, a partir de las 20.00 horas, con merienda campestre.