La plaza de abastos de Ribadesella es "un peligro" y "un problema", señalaron fuentes del equipo de gobierno, de Foro. El edificio está afectado por aluminosis, un mal denominado también "fiebre del hormigón", y presenta problemas estructurales, por lo que su continuidad requeriría una importante inversión económica.
La alcaldesa, Charo Fernández Román, señalaba durante la inauguración del aparcamiento surgido de la demolición de la nave de Delfa, situado junto a la plaza de abastos, que el Ayuntamiento recibirá en breve un informe detallado sobre el estado del edificio. En todo caso, la regidora señaló que reparar la plaza de abastos resultaría "más caro" que demolerla y habilitar en ese mismo lugar un espacio público abierto. Es un cálculo que avalan también técnicos especialistas en la materia.
Fernández Román prefiere tener en sus manos el informe sobre el estado de la plaza de abastos antes de tomar cualquier decisión. Destacó que el debate sobre el futuro del edificio ya está abierto, y las primeras impresiones apuntan a que la mayoría de los riosellanos preferirían demolerlo y habilitar un espacio público en su lugar, lo que posibilitaría recuperar las vistas a la ría, tal y como ha ocurrido con la demolición de la nave de Angulas Delfa. Precísamente la Alcaldesa destacó su convencimiento de que lo que Ribadesella necesita en esa zona es espacio públic abierto para el disfrute de los ciudadanos.
La conservación de la plaza de abastos, además del elevado coste que implicaría su rehabilitación integral, tampoco convence a los dirigentes riosellanos por el espacio que ofrece, "pequeño, menor aún que el salón de actos de la Casa municipal de Cultura", destacó la Alcaldesa. No obstante, algunos colectivos sí se han manifestado en favor de conservar la plaza de abastos y buscarle una utilidad.
La plaza de abastos fue construida en 1936 y es uno de los escasos edificios racionalistas existentes en el concejo riosellano. Fue concebida en su día como lugar de venta de los productos agroalimentarios locales.
La plaza de abastos no tiene ningún tipo de protección autonómica, aunque sí aparece catalogada en las normas subsidiarias de planeamiento que rigen la ordenación territorial y el urbanismo en el concejo. No obstante, en el futuro Plan General de Ordenación (PGO), en la actualidad en fase de redacción, el inmueble quedará descatalogado y sin ningún tipo de protección municipal, al no considerarse que sea un elemento de interés, lo que facilitaría su demolición, si finalmente el Ayuntamiento optara por ese camino.
