El presidente del Comité Olímpico Español (COE) pasó casi desapercibido en el Descenso Internacional del Sella al que acudió invitado por la Federación Española de Piragüismo. Apenas estuvo unas horas en el ala Oriental del Principado de Asturias, pues, arribó avanzada la tarde del viernes, cenó en el restaurante "Casa Manuela", en Cangas de Onís; se hospedó en un establecimiento holetero en las inmediaciones de la ciudad canguesa; y, tras seguir la prueba sellera, junto a Pachi Perurena -presidente de la FIC- y Juan José Román Mangas -presidente de la Española-, retornó a media tarde del sábado a Madrid. Además, la asociación de empresarios de los Picos de Europa (Incatur) le obsequió con quesos de la zona y sidra asturiana.