Visitar este mes la cueva de Tito Bustillo, en Ribadesella, es prácticamente imposible. La gruta con arte paleolítico ha colgado el cartel de completo y sólo es posible hacerlo a partir del día 31 de agosto. Los miércoles, día de entrada gratuita, están completos hasta el último de septiembre, día 27.
La actual es la temporada más larga de acceso a la cueva riosellana, pues se inició el pasado 1 de marzo (quince días antes de lo que suele ser habitual) y concluirá el 29 de octubre. Visitarla se ha convertido en un plan excelente y compatible con un tiempo no demasiado veraniego.
Otra de las novedades de este año es que las entradas se pueden comprar on-line, un sistema que ha sustituido a la reserva que se podía hacer hasta ahora a través de la misma web. Es de esperar que con este método se mejore el aprovechamiento del cupo -150 personas diarias repartidas en diez pases de un máximo de quince en cada uno- ya que no se darán casos de personas que reserven, no se presenten y esa plaza se pierda. A la plataforma de compra de entradas se accede desde la web del centro de arte rupestre, que dirige a una plataforma en la que también se pueden elegir opciones como la visita sólo al centro de arte rupestre o la participación en los talleres del equipamiento. Los gestores de la gruta no admiten, como advierten en la web, devoluciones ni cambio de entradas por cancelación del cliente o por no llegar con la antelación adecuada y tampoco se admiten cambios de fecha ni modificaciones en la tipología de entrada.
Tito Bustillo continúa, por otra parte, cerrando los lunes y martes, algo que ha sido cuestionado por los empresarios del sector turístico. La de Tito Bustillo fue declarada en 2008, junto a otras cuatro cuevas asturianas y nueve más de Cantabria y el País Vasco Patrimonio de la Humanidad por sus extraordinarias manifestaciones de arte rupestre paleolítico.