"José Parres Sobrino es un personaje excepcional, que tuvo dos pasiones, Llanes y la política, y que se desvivió por la modernización cultural, social y política de Llanes", señaló ayer el profesor de Historia Económica de la Universidad de Oviedo Germán Ojeda, que pronunció una conferencia en la Casa de Cultura con motivo del centenario de la muerte del político. Ojeda destacó que Parres Sobrino perteneció una familia que financió el colegio de La Encarnación, construyó y sostuvo el asilo llanisco, y fundó un periódico, "El Pueblo" desde el que luchó por acabar con el caciquismo.

Parres Sobrino abogó por el liberalismo democrático y pronunció discursos que aún son válidos hoy, en los que abogó por regenerar la vida política local acabando con la corrupción, por rescatar el valor y el papel de los emigrantes en el progreso de Llanes, y defendió a las clases populares frente a los conservadores y la aristocracia, lo que le obligó a "exiliarse" y a no participar en la vida política local: fue diputado por Burgo de Osma y senador por Soria.

Ojeda destacó además su "compromiso artístico", al haber ordenado construir el palacio de Partarríu, "obra maestra de la arquitectura modernista".