Tras siete días de fiesta, la capital del concejo de Onís, Benia, puso el domingo el punto final a las fiestas de Nuestra Señora de Castru. Fue con el día de Castrín, que incluyó una misa en la capilla de Castru por todos los vecinos fallecidos, presidida por el párroco de la unidad parroquial de Onís y arcipreste de Covadonga, José Antonio Alonso Artero, y una chocolatada en la pista polideportiva de La Vega. Las celebraciones habían comenzado el día 11 y tuvieron su día grande el martes 15.