La Guardia Civil investiga la misteriosa desaparición de una lancha en el puerto de Llanes. La embarcación fue recuperada la mañana del pasado domingo, a milla y media de la costa de Poo (Po según la toponimia oficial). Una persona, que aún no se ha podido identificar, cogió la lancha sobre las siete de la mañana del domingo y se hizo a la mar, remando. En ningún momento utilizó el motor. La lancha estaba amarrada en los pantalanes situados junto a la plaza de la Magdalena. Dos embarcaciones que en ese momento salían a la mar se cruzaron con el hombre, pero nadie sospechó que había cogido la lancha sin permiso. El propietario, Antonio Cue Fuentecilla, mostraba ayer su extrañeza por lo ocurrido.

"Cuando me dijeron que la lancha no estaba amarrada en el puerto no me lo creía", señaló. A bordo de la misma aparecieron unas chanclas y unos cascos. Se cree que la persona que sustrajo la lancha pudo dejarla en una parte del litoral entre Poo y Celoriu y las corrientes la arrastraron mar adentro. Cue, jubilado y gran amante de la mar, mostró ayer su satisfacción porque la historia de la misteriosa desaparición de su lancha haya tenido final feliz.