El colegio público Manuel Fernández Juncos, de Ribadesella, quedará este curso comunicado mediante un sistema de megafonía. Así lo avanzó el director, Javier Jorganes, quien explicó que por el proceso administrativo que requiere la obra se ejecutará en el primer o segundo trimestre.

Se trata de la principal actuación a realizar en el centro riosellano, en el que el curso pasado se pintó la fachada y se renovó la puerta. El curso ha comenzado en Ribadesella sin grandes cambios, ni en el equipo directivo ni en la matrícula, que sigue estando integrada por unos 200 alumnos.

Las clases han comenzado, además, sin ninguna incidencia y con todo el profesorado incorporado, con "normalidad absoluta", describió Jorganes. Concluida la obra de la megafonía, el equipo directivo estudiará qué posibilidades hay de ejecutar otras mejoras en el centro con el dinero restante.

El colegio público continuará con proyectos como el de informática, el de salud y también con el aula de ajedrez, un espacio destinado únicamente a la práctica de este deporte, así como a su empleo para trabajar otras materias. Un grupo de docentes se ha implicado en elaborar contenidos propios de asignaturas como matemáticas e incluso lenguaje que se trabajan a través del ajedrez.

Defienden lo mucho que aporta esta disciplina al desarrollo intelectual, a la memoria, a la capacidad de análisis y a la resolución de problemas, además de a la capacidad autocrítica y a la concentración, sólo algunos de los beneficios que conlleva su práctica. Dentro del programa de salud, por otra parte, durante el curso suelen recibir la visita de personal sanitario que les enseña cómo componer un menú saludable y adaptado a sus necesidades, con incidencia en momentos como el desayuno. Los alumnos suelen participar, además, en diversos talleres de cocina saludable a lo largo del curso, así como en actividades de otros ámbitos, como el cultural y literario.