Dos de los tres ediles socialistas de Ponga, Luisa Crespo y Gonzalo Sánchez, presentaron ayer su dimisión, según aseguraron, por motivos personales. No obstante, varias fuentes relacionaron las dimisiones con un conflicto surgido en el seno del PSOE en torno a la manifestación convocada -y luego suspendida- a título individual por algunas integrantes la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas de Asturias, en defensa de la alcaldesa, la también socialista Marta Alonso, al considerarla víctima de "presiones machistas".

Los dimisionarios, en cambio, explicaron su marcha por la imposibilidad de compatibilizar sus trabajos con el cargo de concejal, en el que se mantiene la Alcaldesa, que gobierna en coalición con el PP. La dimisión se hará efectiva en el próximo pleno, a finales de mes.

Crespo y Sánchez seguirán en la Agrupación Socialista de Ponga y mantendrán sus cargos, secretaria de Organización y secretario general, respectivamente. El segundo deja también la vocalía de la parroquia rural de Sobrefoz. "Trabajo como auxiliar de enfermería por las noches, tengo dos crías pequeñas y vivo en Llanes, por lo que se me hace muy difícil compatibilizar horarios para asistir a los plenos. Llevo madurando la idea desde antes del verano y para no estar al cien por ciento prefiero echarme a un lado", dijo Sánchez. En similares términos se manifestó Crespo. La Alcaldesa negó desavenencias con los ediles salientes. Los dimisionarios destacaron el "gran esfuerzo para sentar los pilares de una buena gestión", que contrapusieron a la de los anteriores mandatarios, de Foro. Pese a la mala situación económica heredada "se han hecho obras, inversiones, se ha establecido un plan de trabajo" y "se han restablecido las relaciones con el Principado y el parque natural del concejo.