La Mancomunidad de Concejos de Cangas de Onís, Amieva y Onís, más conocida como "mancomunidad chica", celebra hoy a mediodía un pleno extraordinario en el salón de actos del consistorio cangués con el fin de dar luz verde a la cuenta general del ejercicio 2016.

El ente comparte la gestión de servicios sociales, un parque de maquinaria y un taller de empleo desde hace años. Los miembros de la "mancomunidad chica" rechazaron recientemente por unanimidad la incorporación de Ponga, uno de los concejos fundadores, que en diciembre de 2011, durante el mandato del forista Cándido Vega, inició un proceso de separación.

La junta plenaria de la mancomunidad ratificó la salida en mayo de 2014 tras una serie de sonados desencuentros y el abono al consistorio pongueto de más de 18.000 euros. El equipo de gobierno que desde las elecciones de mayo de 2015 encabeza la socialista Marta María Alonso (en coalición con el PP) solicita, de momento sin éxito, volver a formar parte del ente comarcal al considerar que la salida del mismo fue errónea y perjudicial para los ponguetos.